Están siendo unas semanas de lo más emocionantes para Kylie Jenner. Tras empezar el mes celebrando por todo lo alto el primer cumpleaños de su hija, ahora, la joven empresaria más poderosa de los Estados Unidos, según la revista Forbes, ha vivido lo que podría ser uno de los momentos álgidos en la carrera de su pareja, el rapero Scott Travis. Con motivo de la celebración de la Super Bowl, el artista ha actuado en este importante evento deportivo que siguen cada año millones de personas, dentro y fuera del país americano; un día irrepetible que, ni la socialité, ni su pequeña Stormi han querido perderse.
© InstagramUn año más, la Super Bowl ha paralizado a los seguidores del fútbol americano en todo el mundo. Pese a las diferentes polémicas raciales que han rodeado este año la final de la NFL y en la que se han visto involucradas artistas como Rihanna o Pink, 100 millones de personas han vivido en directo un partido en el que los Patriots (equipo que lidera el jugador y marido de Gisele Bündchen, Tom Brady) se han impuesto a los Rams. Pero además del marcador final, si por algo se caracteriza esta cita es por todo lo que sucede a su alrededor: los anuncios que se pueden ver antes, durante y después, la lista de celebrities que se dejan ver en las gradas o las actuaciones que tienen lugar a pie de campo. Un show que en esta ocasión ha corrido a cargo de Maroon 5, Scott Travis, Big Boi y Chloe x Halle, conocidas por ser las protegidas de Beyoncé.
Sin embargo, si ha habido un momento vinculado con la Super Bowl que ha acaparado las redes sociales ese ha sido el vídeo en el que Stormi Webster aparece bailando frente al televisor al ver a su padre actuando sobre el césped. Y es que, pese a tener solo un año, Scott Travis tiene en su hija la mayor de sus fans; una bonita relación que Kylie Jenner ha querido mostrar a sus incondicionales. En el vídeo aparece la pequeña pegada al televisor con una sudadera tie-dye (perteneciente al merchandising del músico); un emotivo momento que la socialité ha calificado como "Priceless" ("No tiene precio"). Una noche muy especial para la familia Kardashian que, según apuntan varios fans, podría haber terminado con una pedida de mano; una información que sin embargo ya habrían desmentido fuentes cercanas a la pareja.
