De la misma manera que la comida rápida, no hacer descansos, o llevarte el trabajo a casa influye negativamente en tu productividad, hay ciertas prácticas que pueden facilitarte las cosas a la hora de enfrentarte a tus tareas a diario. Ser más ordenada o hacer cada día una pequeña lista de objetivos son algunas de ellas, pero también hay un sencillo truco que promete ayudarte. Se trata de la regla de los 90 minutos y según el experto en desarrollo personal Robin Sharma es uno de los métodos más efectivos para incrementar tu productividad.
Según este gurú del bienestar, debes dedicar la primera hora y media de tu jornada laboral (o al menos, antes del mediodía ya que generalmente somos más productivos por la mañana) a realizar la tarea más importante del día, dedicándole plena atención. Debes tratar de concentrarte solamente en una sola actividad y no distraerte con los perfiles de las influencers de Instagram, los emails, o los mensajes del móvil. A priori, parece sencillo de cumplir, y es que una vez hecho esto, te sentirás más liberada, el resto del día podrás afrontar tus tareas de una manera más relajada.
Si sientes que a tu día le faltan horas, puedes comenzar a afrontar tus mañanas de esta manera. Y es que, hacer pequeños descansos a lo largo del día es una de las claves para ser más eficiente. Trabaja hora y media y descansa entre 10 y 20 minutos. Durante este tiempo se recomienda salir a dar un paseo o incluso escuchar música; cualquier cosa vale con tal de despejar la mente. Un hábito que según Anders Ericcson, autor de Peak: Secrets from the New Science of Expertise, es fundamental para trabajar adecuadamente.