Blancanieves gótica
Seguimos con otro ejemplo de piel blanquita, en este caso para inspirar un maquillaje de Blancanieves. Pero no la versión dulce de la película de Disney, sino una interpretación mucho más gótica. A diferencia de los ejemplos anteriores, en este caso la clave no está en los productos iluminadores, sino en la base de maquillaje y, sobre todo, en los polvos compactos y matificantes. Elige un tono más claro del que utilices normalmente; y pinta tus labios en un jugoso rojo, otro de los rasgos más característicos de nuestra protagonista.