Es sin duda una de las películas que más ha dado que hablar en los últimos meses y el trabajo que le ha otorgado el primer Globo de Oro a Demi Moore en sus más de 30 años de profesión. La sustancia, película de terror corporal que supone una sátira sobre los cánones de belleza, se ha ganado el aplauso de la crítica y el reconocimiento también de Margaret Qualley, su coprotagonista.
La actriz de 30 años ha consolidado su carrera con una brillante actuación que le valió una nominación en estos premios que hacen de antesala a los Oscar. Un papel que, sin embargo, le causó a la intérprete algunos problemas de piel que incluso llegaron a dificultar el rodaje de la cinta. Así lo ha revelado esta semana la hija de Andie MacDowell (Cuatro bodas y un funeral) en el pódcast de Happy Sad Confused, donde ha hablado con su presentador Josh Horowitz de los retos que supuso encarnar a Sue en el film de Coralie Fargeat.
Nadie lo diría tras verla posar en la alfombra roja del pasado 5 de enero, con un rostro luminoso y un maquillaje que después se viralizó en Tiktok con diversos tutoriales para recrearlo. Pero para llegar a tener la piel perfecta de la que Margaret Qualley presume ahora, ha tenido que ser muy constante durante un año con su skincare. Y es que las prótesis que utilizaba para rodar La sustancia le provocaron un brote de acné severo que se prolongó en el tiempo.
"Tardé probablemente un año en recuperarme", admitía en el programa. "Hubo un punto en el que ya no podían rodar más mi cara". Ha contado que tuvieron que usar planos estratégicos para que no se notase e incluso cambiar tomas para que apareciese ella de espaldas. El rodaje comenzó en primavera de 2022 y más de doce meses después, todavía seguía teniendo acné: persistió incluso para su siguiente rodaje, el de la película Kinds of Kindness que se estrenó el pasado verano.
El uso de un maquillaje muy denso como el del cine y de materiales como piel artificial o los adhesivos para pegar las prótesis, provocaron este acné en la actriz. Una alteración causada por la obstrucción de los poros, aunque también podría deberse a una posible alergia con una reacción que altera la barrera cutánea.
La limpieza diaria se convierte en un requisito fundamental a la hora de tratar un brote de acné como el de Margaret Qualley: "Independientemente de si te has maquillado o no, debes limpiar tu piel por la mañana y antes de irte a dormir. Una buena opción es usar un gel limpiador suave si tienes piel grasa o mixta, o un limpiador en crema si tienes la piel seca o sensible", explica a ¡HOLA! Aura Serras, directora de iS CLINICAL en España.
También aconseja utilizar productos con vitamina C para evitar granitos inflamados, pues es un ingrediente que posee propiedades antibacterianas e inflamatorias que ayudan a calmar el acné, así como realizar una exfoliación de la piel dos veces por semana con ácido salicílico. "La hidratación es innegociable en cualquier rutina facial", asegura la experta. Apostar por cremas nutritivas y ligeras, y también por el protector solar a diario, es un paso fundamental.