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Que la piel ha sufrido mucho durante la pandemia es un hecho y fenómenos como el maskné (o el acné que surge por el uso de la mascarilla) nacían allá por mayo de 2020 para quedarse. Algunas influencers como María Fernández Rubíes se han sincerado con sus fans sobre su propia experiencia con los granitos y señalaba a la mudanza, la falta de sueño y el estrés como los 'culpables' de sus nuevas imperfecciones. Como plan de ataque, los dermatólogos no dejan de insistir en la importancia de dar con un ritual de cuidados y repetirlo a diario. No importa que estés cansada, perezosa o que no te hayas maquillado, la limpieza, el tratamiento y la hidratación son lo que te separa de levantarte con buena cara todas las mañanas. Laura Escanes lo sabe y acaba de revelar cuáles son los 4 pasos que pone en práctica antes de acostarse.
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"A lo mejor soy un poco pesada con esto y alguna vez lo he dicho pero, no sabéis la diferencia que noto cuando hago una buena rutina de noche", asegura la influencer para después admitir que a ella también le cuesta: "Hay veces que, para qué engañarnos, me da más pereza y como que no le hago tanto caso. Me limpio la cara y me desmaquillo, eso siempre". Y es que, la limpieza es un paso innegociable antes de meterse en la cama pues, a lo largo del día, partículas de contaminación, impurezas, sudor, cosméticos y otras sustancias se adhieren a la superficie de la piel y, si no se eliminan, a medio-largo plazo provocan manchas, tono apagado, puntos negros, deshidratación e incluso acelebran los procesos naturales de envejecimiento: "No os vayáis nunca con la piel maquillada. Es fatal y al día siguiente lo vas a notar, incluso en la mirada y todo", asegura Laura.
Dejando aparte esos días en los que eliminar el maquillaje es el único paso que pone en práctica, la influencer explica en qué consiste su ritual nocturno completo, un paso a paso con el que nota que se reduce la apariencia de marquitas, puntos negros y otras imperfecciones: para empezar, masajea un limpiador porque recuerda que el agua micelar con la que se desmaquilla deja restos de jabón sobre el cutis. Después, "te hidratas bien la piel y los labios, ya sabéis que tengo una batalla últimamente con los labios", cuenta Laura sobre un problema que no solo sufre ella, sino que es cada día más común por el uso de la mascarilla sanitaria y del que habla la cirujana general y médico estético María Vicente:
"Hay un alto porcentaje de pacientes que consultan porque se notan los labios resecos, con pequeñas arruguitas en el contorno de los labios y el mentón, y con el surco nasogeniano más marcado. Además de con más pieles muertas e incluso con 'boceras' (su nombre médico es queilitis). Se trata de una herida que aparece en la comisura, es dolorosa y dificulta la apertura de la boca, y se debe al crecimiento excesivo de hongos y bacterias por humedecerse los labios constantemente con saliva".
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Para terminar, aplica un sérum encima de la crema hidratante, un método que sorprenderá a muchas porque el orden tradicional es justo el contrario pero, como explica la catalana, su fórmula en concreto se utiliza así: "Tiene que ser precisamente el último paso porque actúa toda la noche entonces, al tener esa función de exfoliación como que regenera la piel", justifica Laura.
En cuanto a aquellas que no necesiten un producto como el de la influencer, la farmacéutica Rocío Escalante recuerda la regla clásica: "Ten en cuenta el objetivo y la textura del cosmético, en general los más ligeros van primero. Si haces una doble limpieza, primero el limpiador oleoso y después el acuoso. Después iría el tónico (si usas), el contorno de ojos, el sérum, la crema hidratante, la protección solar y el maquillaje", aunque estos dos últimos gestos quedarán excluídos de las rutinas de belleza nocturnas.
