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'Buttery skin' o la técnica de maquillaje que hará tu piel mucho más bonita

Ultraluminosa y con aspecto hidratado, la tendencia de la temporada favorece tanto como un tratamiento antiedad

El maquillaje de acabado mate encontró un claro competidor cuando, hace unas temporadas, se produjo la invasión de los  iluminadores. Lo que comenzó como un gesto con el que se daba un tímido toque de luz en el punto más alto de los pómulos o debajo del arco de las cejas, ha acabado por conquistar el resto de la cara y ahora lo que está de moda es llevar la piel completamente luminosa. Porque en un rostro hidratado se marcan menos las líneas de expresión, se disimula el cansancio y es sinónimo de juventud, muchas celebrities enfocan sus tratamientos a conseguirlo, como Candice Swanepoel con su mascarilla iluminadora. De esta tendencia ha nacido la buttery skin (piel de mantequilla), la técnica de maquillaje rejuvenecedora bautizada así por la maquilladora Isabelle De Vries. En ella, además de un uso estratégico del iluminador, también el cuidado de la piel es fundamental. Para saber qué productos son necesarios para lograr la piel buttery, los pasos que tienes que seguir y qué pieles deben abstenerse de probarla, hemos hablado con tres expertos que la analizan a fondo.

Exfoliación e hidratación: los pasos clave

Aunque sea una técnica de maquillaje, el cuidado previo de la piel es imprescindible. Eliecer Prince, Makeup Artist de Guerlain Spain, explica que exfoliar la piel dos o tres veces a la semana es el primer paso: “Consigue que la epidermis refleje mejor la luz y no esté tapada por una capa grisácea de células muertas”. El experto recomienda Gommage de Beauté de Guerlain, una fórmula que da luminosidad al cutis, mantiene la hidratación y, lo mejor, es apta para las más sensibles. Junior Cedeño, Maquillador Internacional de Dior, también incide en la importancia de la exfoliación y revela un truco con el que levantarse con la piel lista para poner en práctica la tendencia: aplicar una mascarilla ultra hidratante la noche anterior, como Life Extra Plump de Dior. Su fórmula, además de nutrir en profundidad, alisa la superficie y la suaviza con sensación de ligereza.

Corregir además de iluminar

Antes de aplicar el iluminador, Gato, Maquillador Oficial de Maybelline, recomienda aplicar base de maquillaje y corrector para perfeccionar el aspecto del cutis: “Si tienes la piel muy grasa, opta por una base mate anti brillo y añade el efecto jugoso a puntos específicos del rostro una vez completado todo el maquillaje”. De esta forma la piel no parecerá grasienta, sino bonita y luminosa. En cuanto al corrector, el experto aconseja huir de aquellos con un tono apagado y elegir una opción que aporte luz, como El Borrador de Maybelline.

Si en cambio tienes la piel seca, Prince comparte dos tips profesionales con los que darle un aspecto luminoso: “Mezcla dos gotas de aceite o de iluminador líquido con tu base de maquillaje, le dará un aspecto satinado y muy jugoso”, como Aceite Acuoso Juventud Abeille Royale de Guerlain; y por último, “utilizar un tono o medio tono menos en el fondo de maquillaje de lo que acostumbras; que el resultado sea casi imperceptible, no queremos lucir pálidas sino buscar un rostro luminoso”.

Dónde aplicar la luz

Una vez tienes la piel hidratada y el tono igualado, es hora del ‘efecto glow’: “Añade un toque de brillo en la parte alta del pómulo, en el puente de la nariz, bajo las cejas y en el arco de cupido”, explica Junior. Él sugiere Dior Backstage Face Glow Palette, que incluye cuatro colores en un solo producto para lograr una luminosidad a medida. Por su parte, Gato aconseja evitar los iluminadores de acabado artificial o los que tienen purpurina, elige en cambio aquellos con un brillo natural. Un gesto fundamental para que el resultado del maquillaje sea luminoso y no grasiento es matificar la ‘zona T’ (frente, nariz y barbilla); Eliecer Prince revela la técnica con la que hacerlo sin perder frescura en la piel: aplicar polvos de acabado natural como Meteorites Compact de Guerlain con una brocha en lugar de una borla, ya que la primera no sobrecargará al cutis de producto.

Como toque de color, el experto de Dior apuesta por el blush y las texturas en crema: “en su defecto, mezclar el colorete con una gota del suero Capture Youth, aplicando la mezcla a toquecitos con una brocha plana de colorete”. El producto que recomienda tiene una fórmula ultrafina que se funde con la piel y con la que puedes transformar cualquiera de tus cosméticos en polvo con un acabado más luminoso.

Cuándo evitar la tendencia

El maquillador de Guerlain avisa que “a pieles con poros muy abiertos, con tendencia a brillos, con exceso de grasa y a pieles muy arrugadas, no se le recomienda esta tendencia”, y la razón es que maximizará todas las imperfecciones e incluso marcará más las arrugas. “La buttery skin es una tendencia que se recomienda para pieles secas o mixtas sin imperfecciones", dice, a lo que Gato añade: “sin embargo, son perfectos para chicas de piel apagada o cuando quieres dar un aspecto de piel de porcelana”.

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