La línea que más te favorece y otros trucos que debes conocer antes de enfrentarte al 'eyeliner'
Si sigues estos consejos de experto, no volverás a salir de casa con los párpados irritados por culpa de los intentos fallidos
Existen muchas técnicas de maquillaje para mejorar nuestro rostro en cuestión de segundos. Sin embargo, entre las favoritas de las mujeres está el eyeliner. Basta con incluir una pequeña línea en nuestro párpado móvil para sacar el máximo partido a nuestra mirada. Un truco beauty que descubrimos, allá por los 60 gracias a Elizabeth Taylor y a su papel en Cleopatra, y que años después siguen practicando mujeres como Alessandra Ambrosio, Kim Kardashian o Alexa Chung; expertas en la materia para quienes el arte del eyeliner no tiene ningún misterio.
Aun así, no siempre resulta fácil acertar con el trazado o las herramientas que usamos. ¿Cuáles son los lápices que mejor funcionan? ¿Cómo hacemos para dibujar una línea perfecta? ¿Acaso todos los ojos pueden llevar eyeliner? Dudas que nos asaltan cuando estamos delante del espejo por las mañanas y que gracias a la estilista Sonia Marina tienen respuesta.
Una cuestión de párpados
Al igual que sucede con las prendas de vestir, nunca hay que dejarse llevar por las tendencias sin pararse a pensar en nuestros rasgos físicos. Por muy de moda que esté algo, hay que saber si nos sienta o no bien. “Todas las mujeres pueden ponerse un eyeliner, lo único que tendrán que tener en cuenta es la forma de su párpado. En función de cómo sea, éste podrá sobresalir o quedarse solo a ras de pestaña para proporcionar únicamente más cuerpo en la base de la pestaña”, explica Sonia Marina.
Su recomendación: Cuando el párpado móvil queda escondido dentro del arco de ceja es inútil intentar un eyeliner que sobresalga del ojo, ya que quedará escondido dentro del párpado, lo único que puedes hacer es que el ojo parezcas más levantado con una mínima línea.
Las mejores herramientas
La manera más sencilla de hacer una línea en nuestro párpado es usar un rotulador de punta fina. Su fórmula líquida permite una aplicación fácil y rápida. Asimismo, al tener una punta flexible es perfecto para las que se atreven con acabados en forma de coma.
Si por el contario te consideras una experta, entonces podrás pasar a la fase del pincel y el eyeliner en gel. Al ser más modulable permite cualquier tipo de trazado: más fino, grueso, alargado, etc. Otro de sus beneficios es el hecho de que sea más resistente. En cuanto a los lápices, Sonia Marina no recomienda aquellos de punta grasa ya que tienden a emborronarse. Pero si te sientes más cómoda usando esta modalidad, las puntas finas son más apropiadas.
Manos a la obra
Es sin duda uno de los puntos más complicados en todo maquillaje. Tanto que muchas mujeres necesitan semanas para salir de casa con un eyeliner igual en cada ojos. Pero no bajes los brazos, la práctica hará que logres dar con el trazado perfecto.
El consejo de la experta: “Si quieres realizar un buen eyeliner tienes que hacer una fina línea muy pegada a la pestaña del centro hacia fuera, levantando la línea cuando queden tres o cuatro pestañas para llegar al final. Con un pincel sesgado ayúdate y estira el rabillo hacia arriba. Por último rellena de negro por dentro del ojo del centro hacia el lagrimal”, comenta Sonia Marina. Si tienes cogido el punto del paso anterior, entonces puedes aventurarte a rematar tu eyeliner a lo grande. “Pese a que existen muchos tipos de líneas, el eyeliner que más favorece es el que acabo de explicar. Estira el ojo hacia arriba y no lo hace pesado en su interior ya que la línea se hace por dentro”, termina la experta.