A pesar de ser dos figuras totalmente mediáticas y exitosas en sus respectivos campos, Bradley Cooper y Gigi Hadid siempre han querido llevar su vida personal con absoluta discreción, por lo que no sorprende que nunca se hayan pronunciado con respecto a su relación. Los rumores acerca de un posible romance entre el actor y la modelo comenzaron hace poco más de un año, y unos meses después un apasionado beso confirmaba que lo suyo era más que amistad. A estas alturas, tampoco se ocultan, y viven con la absoluta naturalidad de dos enamorados que disfrutan de sus citas románticas ajenos al interés que despiertan. Este verano quedaba claro que lo suyo iba en serio al irse de vacaciones a Cerdeña junto a Lea, la hija que él tuvo fruto de su relación con Irina Shayk, y Gloria Campano, inseparable madre del intérprete. En las últimas horas, han sido vistos paseando su amor por la Gran Manzana en dos nuevas apariciones que reafirman su conexión incluso a niveles de moda.
Hace unos días, la pareja asistió al teatro para ver a su amiga Alyssa Milano en una de sus últimas funciones como Roxie Hart en el musical Chicago, tras lo que posaron junto a la actriz y su coprotagonista Kimberly Marable en el Teatro Ambassador, dejando bastante claro que, aunque no les encanten las muestras públicas de afecto, eso de ocultar su relación es ya cosa del pasado. Tan solo unas horas después, volvían a ser vistos, esta vez por las calles de Manhattan, derrochando sonrisas, complicidad y estilazo con dos estilismos relajados y de tendencia que reafirman que hoy en día son uno de los dúos más cools del panorama internacional.
No es nada extraño que una pareja acabe mimetizándose hasta el punto de compartir estilo o, incluso, armario. David y Victoria Beckham fueron grandes pioneros en esta tendencia, hasta el punto de que crearon escuela con sus siempre comentadísimos looks a finales de los 90 y principios de los 2000, pero no son los únicos: imposible olvidar los conjuntos denim de Britney Spears y Justin Timberlake para asistir a los American Music Awards de 2001. A día de hoy, Brooklyn y Nicola Peltz-Beckham o Bella Hadid y Adan Banuelos son ejemplo de este tipo de simbiosis estética a la que ahora se han unido Gigi y Bradley.
Apostando por el menos es más pero aportando una nota de color muy llamativa, han paseado por la calle dejando clara su conexión. Él, con una camiseta básica de algodón en rojo, pantalones anchos en tono índigo y zapatillas a juego y llevando un jersey blanco en la mano por si acaso luego refrescaba. Ella, en los mismos colores pero a la inversa, es decir, camiseta blanca y sudadera roja anudada sobre el pecho, además de vaqueros, también de corte amplio, y deportivas. Para rematar, ha demostrado el poder que tienen los accesorios rematando con un diminuto bolsito de mano, gafas de sol oscuras de inspiración retro, gorra deportiva y múltiples collares dorados con brillantes al cuello.
Estilos que conectan
Aunque las ocasiones en las que hemos visto a la pareja en público desde que comenzaron su relación son contadas y no siempre han ido tan coordinados como ayer, lo cierto es que siempre comparten estética. Les encantan los looks relajados pero fieles a las tendencias, que juegan con las capas, las prendas oversize -en especial, los pantalones muy anchos-, las deportivas y otros accesorios que marcan la diferencia. En resumen, son fieles al mismo estilo desenfadado pero extremadamente cool.
Las zapatillas que enloquecieron a sus fans
Hace justo un año, cuando todavía jugaban al despiste, hubo un detalle en los looks de Bradley y Gigi que revolucionó a sus seguidores. A principios de octubre de 2023 se hicieron públicas unas imágenes que mostraban a la modelo y el actor saliendo a cenar por Nueva York, y posteriormente se desveló que se habían conocido a través de la propia Irina Shayk, exnovia de él y madre de su hija, Lea. Aunque en aquel momento todo eran especulaciones y lo único oficial era que ambos se llevaban a las mil maravillas, su conexión a través de la moda sirvió para alimentar las teorías de los fans, las cuales terminaron, por cierto, siendo ciertas.
En aquella época, Gigi colaboró con la emblemática firma Adidas versionando el modelo Samba en tono amarillo y con las famosas franjas laterales en azul klein a contraste, un diseño creado específicamente para la apertura de la nueva tienda de Guest In Residence -marca de Gigi-, que se diferencian de las originales de la marca alemana por incluir un grabado en dorado con la dirección del local de Bond Street que poco antes había inaugurado la propia top. El caso es que era una edición tan limitada que resultaba prácticamente imposible conseguirlas... excepto para Bradley. El actor fue visto, apenas unos días después, luciendo este llamativo par, el cual tenía pinta de ser un regalo de su nueva novia.
Sin embargo, aquella no fue la única vez en la que el protagonista de Ha nacido una estrella quiso apoyar a Gigi con su aventura empresarial, puesto que, más o menos por las mismas fechas, se puso también una camisa de cuadros que sus fans no tardaron en distinguir, una pieza de la citada firma de la modelo. De nuevo, un guiño que, más allá de la publicidad que supone para la marca, demostraba el cariño que siente hacia su fundadora.