El rey Juan Carlos con el Aga Khan y su esposa la Begum Salima en una de las cenas organizadas con motivo de la celebración de la regata
El duque de Edimburgo se trasladó a la isla de Wight, al sur de Inglaterra, para presenciar la competición
Cerca de 200 veleros de todo el mundo se han dado cita esta semana en Cowe
23 AGOSTO 2001
El apacible pueblo de Cowe ha abandonado por unos días su habitual calma para convertirse en la sede de la regata jubileo de la Copa América. En Cowe, situado en la isla de Wight, al sur de Inglaterra, acoge esta semana a los más espectaculares veleros y a los regatistas más avezados.
Allí está el rey Juan Carlos que, a la caña del Bribón, participó en la conmemoración del 150 aniversario de la Copa América. El empresario Robert Miller, padre de Marie-Chantal Miller, también tomó parte en la prueba a bordo del Mari-cha III, su impresionante embarcación, mientras su yerno el príncipe Pablo de Grecia aprovechaba para pasear por el pintoresco pueblo británico.
En el Danebrog, compitió el príncipe Henrik de Dinamarca, esposo de la reina Margarita, mientras que el duque de Edimburgo y los condes de Wessex disfrutaron de la espectacular estampa de los 200 veleros batiéndose contra las olas durante la regata.
En la isla de Wight, donde en la época de la reina Victoria la Familia Real británica disfrutaba tradicionalmente de sus vacaciones veraniegas, se han dado cita también estos días el empresario italiano Giovanni Agnelli, el diseñador Giorgio Armani y el líder espiritual de los ismaelitas el Aga Khan. El Aga Khan, que es un gran amigo del rey Juan Carlos abandonó sus vacaciones en el exclusivo complejo de Costa Esmeralda para seguir desde su yate el desarrollo de la regata, que data de 1851, en compañía de su mujer, la Begum Inaara.