EL PAPA JUAN PABLO II CIERRA LA PUERTA SANTA

8 ENERO 2001
Fue todo un alarde de fuerza de voluntad. El papa Juan Pablo II, visiblemente fatigado, llegó al umbral de la Puerta Santa y logró cerrarla en el transcurso de la última ceremonia del Jubileo 2000.

De esta forma, el Papa cumplió la profecía del cardenal Wyszynski: "Tú ganarás el siglo XXI al frente del rebaño". Ha transcurrido algo más de un año desde aquel 24 de diciembre de 1999, fecha en la que él mismo la abrió. Durante este periodo, más de 25 millones de personas pasaron por esta puerta.

De acuerdo con una antigua tradición, la Puerta Santa ha estado tapiada con piedras de granito, para que sólo los peregrinos con un gran fervor fueran capaces de entrar en la catedral. Este ritual tiene lugar cada Año Santo cuando el arzobispo abre la Puerta Santa.

Todos los peregrinos intentan conseguir un trozo de piedra de la Puerta Santa con el fin de expresar la resistencia necesaria para superar el peregrinaje en el duro Camino de Santiago

Bautizó a 18 niños
Al día siguiente, ofició uno de los actos que mayor gratificación le han proporcionado durante su pontificado: bautizó a 18 niños.

También en estos días, el Papa firmó una carta pastoral titulada "El nuevo milenio que empieza", en la que el pontífice apuesta por el diálogo para promover una cultura de paz. "Sólo así la riqueza específica de los pueblos no se dispersará, sino que al contrario podrán ayudar a construir una nueva era de fraternal solidaridad". En la misiva, el Papa condenó fuertemente el racismo y la xenofobia y animó a aceptar los principios éticos que los inmigrantes del mundo nos aportan.