1/9 © iStock

¿Ya tienes hecha tu lista de propósitos para el año nuevo? ¿Y si le das la vuelta y te planteas otros no tan 'buenos' pero que también van a mejorar tu salud? Te proponemos estos 8 objetivos, un pelín más rebeldes, pero que te ayudarán a disfrutar más y mejor del 2018:

- Practica el egoísmo

- Escápate de la oficina

- Deja la ropa sin planchar

- Come más hidratos y grasas

- Duerme un poco menos

- Incordia a tus vecinos

- Gana peso

- Sé menos complaciente

¿Has tomado nota? Ahora, si quieres saber por qué los proponemos, ¡sigue leyendo!

2/9 © iStock

Practica el egoísmo 
 

Pero el sano... "Cuando nos centramos en nosotros mismos, cuando somos capaces de ver aquello que nos falta y de luchar por conseguirlo, cuando somos capaces de decidir anteponer una necesidad nuestra a la de otro pensando en las consecuencias a largo plazo, es cuando estamos practicando el egoísmo sano (o egoísmo altruista). Este tipo es bueno y ayuda a que nuestra autoestima mejore con el tiempo", indica la psicóloga Judit Izquierdo, CEO de Siquia Psicólogos. Por tanto, no te olvides de añadirlo a tu lista de buenos propósitos. 

3/9

Escápate de la oficina
 

Y cógete un día libre. Pero no le digas a nadie de tu familia que no vas a trabajar y dedícate la jornada para hacer aquello que más te gusta. "Es difícil tomar esta decisión, pedir un día libre y de verdad disfrutar de él. Problemente nos sintamos culpables. Pero lo necesitamos. Y el descanso debe ser de calidad, es decir, hacer aquello que realmente nos produce placer. No nos damos cuenta de que siempre estamos pensando en 'tengo que hacer esto o aquello'. Esto nos genera más estrés y a la larga, ansiedad. Por eso tenemos que decir 'basta'. Además, cuando más descansados estemos más rendiremos. De hecho, es algo que las empresas deberían tener en cuenta: no por tener a sus empleados más tiempo en la oficina estos serán más eficaces...", señala el psicólogo Miguel Ángel Rizaldos. 

4/9

Deja la ropa sin planchar 
 

Y la casa por hacer. ¿Por qué? Para tener más tiempo libre el fin de semana para salir al campo a respirar aire puro. Debido al ritmo frenético que nos impone la sociedad actual, solemos dejar todas estas tareas para el fin de semana y nos olvidamos de lo importante que es desconectar y pasear bajo los árboles. Así lo puso de manifiesto una investigación publicada en la prestigiosa revista Nature en la que se recordaba que el contacto con la naturaleza y los paseos en entornos alejados del mundanal ruido se asocian a un mayor bienestar psicológico. En los niños hasta mejora el rendimiento cognitivo, según revista Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS)

5/9

Come más hidratos y grasas 
 

Erróneamente, se asocian los hidratos de carbono con el pan y la pasta. Pero hay muchos más alimentos que pertenecen a este grupo. Las verduras, las legumbres, los cereales -mejor integrales para que conserven todos los nutrientes-, los tubérculos son hidratos complejos que se absorben lentamente. Las frutas y el azúcar por su parte son simples y su absorción es rápida. Ambos grupos, sobre todo los complejos, son necearios para que tu organismo funcione correctamente. Y es que tienen una misión muy importante: darte energía. También regulan el tránsito intestinal y previenen las subidas de azúcar o el colesterol malo alto. Por su parte, las grasas ayudan a transportar vitaminas, participan en la formación de hormonas, de las membranas celulares y son necesarias para el cerebro. Las más saludables son las insaturadas (monoinsaturadas, como las del aceite o los frutos secos) y las poliinsaturadas (como las del pescado azul o las semillas). Eso sí, huye de las grasas trans. 

6/9 © iStock

Duerme un poco menos...
 

... y haz más vida social. Y es que no pasa nada porque un día (no muchos más, porque el cansancio crónico es malo) tengas más ojeras si la noche anterior disfrutaste de una agradable velada. "Ser activos, e independientes, tiene multitud de ventajas. Añado lo de independiente porque hay muchas personas que viven solapadas a sus parejas y que parece que no realizan ninguna actividad si no es con la otra parte al lado. Realizar actividades variadas nos ayuda a desarrollarnos como personas, conocer habilidades que quizás teníamos ocultas, nos hacen sentir bien y, en algunos casos, incluso generamos hormonas del placer como es en el caso de las actividades deportivas", señala Izquierdo.  Si te cuesta la vida social, empieza con metas pequeñas y factibles y si ves que no puedes, pide ayuda a un profesional. 

7/9

Incordia a tus vecinos ...
 

cantando en la ducha, en la cocina, en el salón. Te van a odiar, sí. Pero quizá, a la larga, se sumen a tu iniciativa. Y es que cantar aporta muchos beneficios. Reduce el estrés, segrega endorfinas (las hormonas del bienestar), es bueno para el corazón, para el alma y ¡protege la memoria!, según un estudio publicado en la revista Journal of Alzheimer’s Disease. También mejora el bienestar en enfermos pulmonares según recoge la Fundación Europea del Pulmón.

8/9 © iStock

Gana peso
 

Ganar peso no significa que engordes. Todo lo contrario. Siempre que llevemos una dieta saludable y hagamos ejercicio físico transformaremos la grasa en músculo, y este pesa más. Ahora bien, no todo el ejercicio vale. "Para ganar músculo a costa de perder grasa hay que atacar el objetivo desde dos puntos de vista: primero nutricional, disminuyendo la ingesta de azúcares y grasas y aumentando ligeramente la ingesta de proteínas; y en segundo lugar realizando ejercicios de tonificación muscular, combinado con ejercicios cardiovasculares. Evidentemente tanto lo uno como lo otro debe ir equilibrado,  por lo que lo mejor es ponerse en manos especializadas", explica el doctor Juan Carlos Segovia, experto en Medicina del Deporte. 

9/9 © iStock

Sé menos complaciente...
 

...y dí: ¡hasta nunca gente tóxica! "Una persona tóxica puede generarnos malestar, sentimiento de inferioridad, podemos sentirnos manipulados, apáticos, más negativos, ninguneados o intimidados. No descartemos tampoco la humillación, incluso públicamente. Es importante 'desintoxicarnos', tomar distancia y aprender a canalizar las emociones que nos genera la persona tóxica. Efectivamente, esto no es sencillo, sobre todo si es nuestra pareja. Pero si no somos capaces de salir de esta espiral que nos hace daño a largo plazo puede derivar en baja autoestima o, incluso, en depresión. Conviene consultar con un psicólogo que nos ayude a tomar decisiones al respecto", señala la psicóloga de Siquia.

Más sobre: