Correr es uno de los ejercicios cardiovasculares más efectivos para quemar calorías, grasa, adelgazar y gozar de una buena salud. Pero, a pesar de que es un ejercicio apto para la mayoría de las personas que no tienen un problema físico o enfermedad que se lo impida, no siempre logramos aguantar corriendo más de 5 minutos. Incluso 2 minutos son excesivos para muchos. "Me ahogo, no mantengo la respiración, tengo flato" son algunas de las frases que repetimos cuando intentamos correr y no lo conseguimos. Pues bien, tenemos una buena noticia. Tú también puedes convertirte en una runner y disfrutar de este deporte si sabes cómo.
Veamos qué tienes que tener en cuenta antes de empezar tu carrera.
- Cuánto hay que correr para adelgazar con este ejercicio
Cómo empezar a correr
El truco para empezar a correr sin cansarte, aguantar y disfrutar del running es ir de poco a más. Como tu cuerpo no está acostumbrado a practicar este deporte, al principio es aconsejable que combines la caminata a paso rápido con el trote. Por ejemplo, puedes seguir el siguiente entrenamiento:
El primer día que entrenes te puedes poner el objetivo de entrenar durante 20-30 minutos en los que realizarás el calentamiento, el running y la recuperación, nos recomiendan Marie Poirier y Soledad Bravi, las autoras del libro 'Running para perezosas' (Ed. Lunwerg).
- Anda deprisa durante 10 minutos.
- Corre 1 minuto
- Anda deprisa 1 minuto
- Corre 1 minuto
- Anda deprisa 1 minuto
- Corre 1 minuto
- Anda deprisa 1 minuto
- Corre 1 minuto
- Anda deprisa 1 minuto
Poco a poco, puedes ir incrementando el tiempo que le dediques a correr. En vez de ser 1 minuto, pueden ser 2. La tercera semana ya serás capaz de correr 5 minutos. Al mes, es muy probable que tu resistencia en la carrera haya aumentado y ya puedas correr 20 minutos sin cansarte. Hasta que finalmente logres correr 30 o, incluso, 45 minutos. La clave, como decíamos, está en la paciencia y en empezar siendo consciente de tus limitaciones para superarlas poco a poco.
Eso sí, hay otros aspectos que tienes que tener en cuenta cuando vayas a practicar este ejercicio. Los expertos en fitness de JD Sports nos dan los consejos para correr sin riesgos y disfrutar.
Calienta antes de salir y estira al finalizar
Lo primero que tienes que tener en cuenta antes de empezar a correr es que el calentamiento y el estiramiento son dos partes esenciales de cualquier entrenamiento. Muchas veces tendemos a saltárnoslo ya que queremos pasar a la acción lo antes posible, y en cuanto terminamos ya nos sentimos realizados y nos aburre dedicar unos minutos a estirar. Pero esto siempre es un error. Necesitamos preparar el cuerpo para lo que se le viene y calentar los músculos para así evitar posibles lesiones. Del mismo modo, al finalizar, es imprescindible relajar todas las partes de nuestro cuerpo y estirarlas para evitar futuras agujetas.
Escucha a tu cuerpo, ¡no lo lleves al límite!
No todos los días nos sentimos al 100% y hay que saber qué es lo que nos pide nuestro cuerpo. Si un día vemos que necesitamos caminar en lugar de correr, hagámoslo, no nos torturemos porque no cumplamos nuestro objetivo semanal. Nuestro cuerpo nos lo agradecerá y al día siguiente, cuando nos calcemos nuestras deportivas, sentiremos más energía que nunca, ya que un día de descanso ayuda a recargar pilas para superarnos posteriormente.
Mantén tu cuerpo hidratado
Es necesario a la hora de practicar ejercicio, y esto no incluye únicamente el momento de la práctica, sino hacerlo durante todo el día. Asegurarse de haber bebido suficiente cantidad de agua un par de horas antes de realizar el entrenamiento para así rendir al máximo. Si la carrera es larga, se recomienda dar pequeños sorbos durante la misma. En cambio, si es corta, no es necesario llevar una botella con nosotros, pero siempre será importante rehidratarnos al llegar a casa tras el entreno.
- Running: Si quieres perder peso, empieza a correr con este plan
Márcate objetivos alcanzables, sin presiones
Entrenar teniendo en mente una meta nos ayudará a mantenernos motivados. Es esencial ir poco a poco y no tener prisas. Los objetivos a corto plazo y fáciles son siempre los mejores, ir sumando kilómetros de menos a más. Si el objetivo es correr una maratón, ¡adelante! Pero siendo realistas, en tres semanas no estaremos preparados para terminarla, por lo que la preparación y la constancia son clave en esta modalidad.
- Tres ejercicios de fuerza para hacer en casa, si quieres empezar a correr