El juego es una de las mejores formas de relacionarnos con los demás y estrechar lazos. Jugando nos comunicamos, nos divertimos, reímos y segregamos endorfinas, nos relajamos y nos entretenemos. Por ello, los juegos de mesa son los reyes de las navidades. "Se trata de una actividad lúdica, lo que en sí es beneficioso, dado que aporta bienestar a través de la diversión", nos asegura Pilar Conde, de Clínicas Origen. Además, continúa la experta, con el juego se potencia la interacción social, el respeto, la comunicación, la tolerancia, la frustración y se estimulan las capacidades cognitivas.
¿Cómo hay que elegir un buen juego?
A la hora de comprar un juego de mesa hay que tener en cuenta varios aspectos. Por ejemplo, la experta en psicología recomienda pensar en el aforo. También hay que procurar que sea estimulante y divertido para todas las partes (niños, adultos y abuelos). "Todo ello hará que se potencien las ganas de participar".
Una vez empiece el juego, es importante que dejemos todo lo demás a un lado y nos centremos en la actividad y fluyamos con la dinámica del juego.
Una oportunidad para la gestión de las emociones
Por último, se pueden dar casos de frustración o surjan dificultades. Sabemos que todos estamos nerviosos y podemos 'saltar' a la mínima. En este sentido, Pilar Conde sugiere gestionar todas la emociones que surjan en el contexto del juego. Por lo que es importante "no dejarse llevar por ellas, entender lo que estamos sintiendo y por qué, y verlo como una oportunidad para comprendernos mejor y practicar la autorregulación", concluye la experta.
A continuación, os dejamos algunas sugerencias para que podáis disfrutar jugando en familia.
- Así influyen los juegos de mesa para niños en el desarrollo infantil
Dixit
Dixit es un juego de mesa de tres a seis jugadores a partir de ocho años donde el objetivo es encontrar la carta que inspiró una frase enigmática. Es un juego sorprendente y divertido para disfrutar con la familia o entre amigos, ideal para dar rienda suelta a la imaginación. Nunca aburre, ya que cada partida es una aventura diferente.
De 3 a 6 jugadores y a partir de 8 años
Dobble
El juego para todas las edades. Fomenta la agudeza visual por medio de cartas con símbolos repetidos que deben encontrarse rápidamente. Es un juego dinámico en el que prima la velocidad, la observación y la concentración de los jugadores, adaptable tanto para niños como para adultos, e ideal para cinco o seis personas. A pesar de que hay diferentes versiones, incluida la infantil, el Dobble clásico cuenta con cinco minijuegos para fomentar diferentes tipos de partidas entre los jugadores.
Party Family
Con este juego, toda la familia será retada a imitar, dibujar, hacer figuras grotescas con el cuerpo mientras sostienen unos dados, responderá a originales preguntas y, sobre todo, se divertirá. Basado en el mítico juego, esta nueva versión para adultos y niños se ha convertido en un imprescindible si queréis pasar momentos inolvidables.
A partir de 8 años.
El resplandor
Uno de los jugadores interpretará al traidor, que ya ha sido poseído por las terribles fuerzas que emanan de todo el hotel, y su misión es mantener a los otros prisioneros dentro del hotel por siempre y para siempre. En cada habitación y pasillo se respira un aire extraño y aterrador, y los sueños están plagados de siniestras visiones del pasado que van corrompiendo la mente poco a poco. Misterioso y entretenido, este juego es una nueva adquisición que no dejará indiferente a nadie.
A partir de 17 años
Monopoly
Un clásico de los juegos de mesa que nunca pasa de moda y que pondrá a prueba la pericia de cada uno para amasar una gran fortuna. Basta lanzar los dados para empezar a comprar, construir la ciudad que sueñas, invertir y hacerte un experto del mercado inmobiliario sin moverte del salón.
A partir de 11 años
Twister
No hay mejor juego que este para bajar los turrones tras la comida de Navidad. Eso sí, calentad antes o los estiramientos a los que te obliga el juego pueden hacer que acabes con una lesión. Twister es uno de los juegos más divertidos para poner a prueba nuestra forma física.
A partir de 6 años
Timeline
Puro aprendizaje de historia. Es un juego con 220 cartas en el que cada carta muestra un evento histórico, un invento o un descubrimiento en ambas caras, pero con el año solo impreso por una de las dos. Los jugadores juegan su turno ordenando las cartas en una fila frente a ellos. Después de poner la carta, hay que comprobar la fecha. Si la fecha es correcta, la carta se queda en la fila, pero si no, hay que descartarla del juego y robar otra. Es un juego que pone a prueba los conocimientos de historia teniendo que colocar en orden diferentes eventos, al tiempo que logra educar al despertar la curiosidad de adultos y niños.
A partir de 11 años