Las bicicletas van ganando protagonismo en muchas ciudades. Y, de forma indirecta, la crisis del coronavirus puede echarle una mano a este medio de transporte sano, seguro y que no contamina. Sin duda alguna, es una de las alternativas más recomendables para nuestros desplazamientos, también durante la desescalada. Y los ciudadanos parecen estar de acuerdo, pues los datos recogidos por el comparador de precios de Idealo muestran el aumento de la demanda de bicicletas de un 263 % a partir del mes de mayo, cuando ya se había anunciado la fase 0.
“La bici se postula como uno de los métodos de transportes alternativos para la vuelta al trabajo”, comenta Adrián Amorín, country manager de idealo.es. “Ante las aglomeraciones en el transporte público y los atascos de los coches, la bici ofrece la opción de desplazamiento perfecta, sobre todo ahora de cara a los meses de verano y buen tiempo”, añade. Hoy precisamente se celebra el Día Mundial de la Bicicleta y es un buen momento para recordar por qué se convierte en una buena aliada, tanto desde el punto de vista del medio ambiente como por ser beneficiosa para nuestra salud.
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Permite mantener la distancia interpersonal
Estamos aún en plena pandemia por coronavirus y la exigencia de mantener la distancia entre personas es vital para frenar su expansión. Tal y como matizan los expertos de Norauto, la bicicleta es un medio de transporte individual, por lo que no hay riesgo de contagio, pues si se respetan las normas, permite mantener los 2 metros de distancia respecto a otros usuarios. Hay que intentar evitar, eso sí, las aglomeraciones que se producen a veces en las grandes ciudades, y elegir los recorridos menos transitados.
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Minimizar los riesgos de contagio
Es evidente que si la bicicleta es de uso individual, se reducen las posibilidades de contagio. Evitamos de esta forma tocar algún elemento que haya sido manipulado por otra persona y que, por lo tanto, pueda estar contaminado. Usando este medio de transporte sostenible, las posibilidades de contagio se reducen drásticamente. Y aún así, es fácil de desinfectar, de forma sencilla, limpiando el manillar y o los frenos (que son las zonas que entran en contacto con las manos) con la ayuda de unas toallitas desinfectantes.
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Una buena alternativa para mantenerte en forma
Y, además, hay que sumar un extra muy importante: te ayuda a mantenerte en forma pedaleando. Es otra de sus grandes ventajas. Usar la bicicleta hace que estemos en mejor condición física y tiene beneficios para nuestra salud, pues nos ayuda ejercitar, sobre todo, la musculatura de nuestro tren inferior, piernas y glúteos, a la vez que quemamos calorías. Junto con la carrera y la natación, es una de las mejores maneras de mejorar la capacidad aeróbica, ayuda a mejorar tu tono muscular y, además, es beneficioso para tu salud cardiovascular. Y aún hay más: al contrario de lo que sucede por ejemplo en el running, el uso de la bicicleta es compatible con la utilización de otros elementos de protección como la mascarilla o guantes, aunque puede no ser necesario si hay posibilidad de mantener esa distancia de seguridad.
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Le haces un favor al medio ambiente
Estamos ante un medio ecológico, que se convierte en una excelente alternativa para disminuir los datos de contaminación en las ciudades, contribuyendo a una movilidad urbana más sostenible. Hay que tener en cuenta que utilizar la bicicleta disminuye el impacto medioambiental y supone un ahorro económico respecto a otras formas de transporte. En Norauto hablan, por ejemplo, de las bicicletas eléctricas, y apuntan que mientras que recorrer 1.000 km en coche supone un coste de 85 euros en carburante, este mismo recorrido con bicicleta eléctrica supone un coste de 1 euro en la factura eléctrica. Y si hablamos en términos de contaminación, un coche emite de media 189 gr de CO2 por kilómetro recorrido mientras que una bicicleta eléctrica emite de media menos de 15 gr de CO2. Sin duda, las diferencias llaman a la reflexión.
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Beneficios también para tu mente
Además puedes obtener ventajas no solo a nivel físico, sino que puedes aprovecharte de que el ciclismo es una de las actividades que más oxigena el cerebro y que te ayuda a combatir el estrés. Al pedalear generas endorfinas, una hormona que ayuda a liberar el estrés y , proporciona relajación. Te ayuda a combatir el estrés y la ansiedad.
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¿Y si usamos una bicicleta pública?
En el caso de las bicicletas compartidas o de alquiler, hay que extremar las precauciones, siendo recomendable desinfectar especialmente aquellos elementos que se tocan como son el manillar o el freno. En Madrid, por ejemplo, se ha reactivado ya el servicio de alquiler de bicicletas BiciMad, y los servicios de limpieza de la capital proceden cada noche a la desinfección de todas las estaciones -pantallas, teclados, soportes...- y todas las bicicletas mediante un sistema de pulverización con vehículos especializados en dicha labor. Además, en el caso de la capital, es obligatorio el uso de guantes.