Remedios caseros y consejos útiles para combatir las náuseas

Tal y como nos explica la farmacéutica Lucía de la Cierva, del grupo Marta Masi, las náuseas consisten en una sensación de malestar estomacal o ganas de vomitar. Las náuseas pueden presentarse incluso cuando la persona no está pensando en comida. “Su síntoma principal es la sensación desagradable que sufre la persona de ganas de vomitar sin llegar al vómito. En un gran número de los casos se acompaña de mareos”, explica pla Dra Yolanda López Perna, de Medicina Interna, Hospital Sanitas CIMA.

¿Cuáles son los motivos que las causan?

“Los motivos más habituales por lo que podemos presentar náuseas son, en primer lugar, por afectación digestiva (gastroenteritis…). En segundo lugar, pueden aparecer por el consumo de fármacos (morfina, quimioterápicos…) o sustancias tóxicas (especialmente las bebidas alcohólicas”, nos explica la Dra Yolanda López Perna. Pero hay más causas, como nos matiza Lucía de la Cierva, quien, entre las más frecuentes cita también la anestesia general, oclusión intestinal, migraña, malestar matutino, mareos por movimiento, rotavirus, náuseas matutinas durante el embarazo, migrañas, mareo, intoxicación alimentaria, medicamentos, reflujo gastroesofágico, úlceras y obstrucción intestinal. 

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¿Cómo podemos evitarlas?

Lucía de la Cierva recomienda, antes de recurrir a fármacos o al médico innecesariamente, si las náuseas son una molestia ligera, tomar ciertas medidas sencillas, como limitar la alimentación a alimentos suaves y no pesados (pan tostado, pescado al horno, pasta, arroz…), elegir un lugar tranquilo para comer, sin ningún tipo de estrés, sin olores ni sonidos fuertes, o permanecer sentado después de comer (es muy importante no tumbarse durante la digestión). También es buena idea ingerir alimentos con mucha cantidad de agua, como sopas o purés de verduras, así como salir a tomar aire fresco, entretenerse con un libro, televisión o algo que le relaje para proyectar su mente en otra cosa que no sean las náuseas. Y hay que evitar la cafeína, el alcohol y alimentos con olores o sabores fuertes, así como aquellos con altas proporciones en grasas saturadas, azúcares y ultraprocesados.

Cuando el problema es más serio, la doctora Yolanda López explica que si la causa es una afectación digestiva, se tiene que tratar la causa del problema (por ejemplo, en una gastroenteritis con fiebre daríamos un antibiótico) y tratar los síntomas (fármacos antieméticos para impedir el vómito, protectores del estómago si hay dolor abdominal, intentar hidratar al paciente por vía oral y si no es posible con sueros endovenosos). En caso de que la causa sea un fármaco, se tendrá que hablar con el médico tratante para que disminuya la dosis de los fármacos que las producen o cambiar el tratamiento.

Jengibre

Estamos ante un buen aliado frente a este incómodo problema. Lucía de la Cierva apunta que, en el caso de las náuseas motivadas durante el embarazo, una opción es desayunar un par de galletas a primera hora del día. También se aconseja tomarlo en formato té, 20 minutos antes de viajar, en el caso de que nos genere malestar. 

Respirar profundamente

La experta de la Farmacia Marta Masi apunta que en caso de mareo y malestar, se aconseja que el paciente respire profundamente, desde el abdomen. Además, ayudará también a relajar a la persona. Al respirar profundamente, se comprime el estómago haciendo presión con el diafragma, por lo que el contenido estomacal difícilmente asciende hacia la boca. Por otro lado, se recomienda entrar en contacto con aire libre.

Vinagre de manzana

Es un recurso muy utilizado por las celebrities como remedio casero. Y en este caso, la farmacéutica explica que solo con enjuagarse la boca con vinagre de manzana es suficiente. Sería muy importante no acercar el vinagre a la nariz, ya que el aroma fuerte y penetrante de este ingrediente puede inducir fácilmente al vómito.

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Aplicación de calor en la zona

Otro remedio bastante popular consiste en colocarse compresas de agua caliente sobre el vientre. ¿Qué conseguimos? Esta medida ayuda a relajar el estómago, aliviar las contracciones y, finalmente, prevenir las náuseas.

Infusión de manzanilla

Estamos ante una de las infusiones más populares, que posee propiedades muy favorecedoras para la salud del sistema digestivo. También relaja y reduce la inflamación. De ese modo, también aliviará la incómoda sensación en el estómago. Eso sí, es importante no abusar y beber en pequeños sorbos.

Evitar tumbarse

Si la persona se siente mareada, con náuseas y próxima al vómito, lo mejor será colocarla en una posición ligeramente reclinada, con la espalda apoyada y la cabeza hacia arriba y no acostada. ¿La razón? De lo contrario, se inducirá el vómito y empeorará la situación.

Menta

La infusión o té de menta se suele consumir después de una comida para facilitar la digestión y prevenir la irritación intestinal, los espasmos y el reflujo gástrico. Sin embargo, también puede utilizarse para prevenir las náuseas.

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Hielo

Tal vez te sorprenda este remedio, pero el frío del hielo consigue que las contracciones del estómago se ralenticen y por ello se reduce esa facilidad de devolver.