Las señales de que has alcanzado la madurez emocional y sus ventajas
Madurar no es sinónimo de vejez ni de hacerse mayor, sino de enfrentarse a la vida con una mejor gestión de las emociones, con más quietud y paz interior
La madurez es una etapa por la que pasamos todos y que, por lo general, no solemos acoger con demasiada alegría, siempre y cuando lo relacionemos, únicamente, al paso del tiempo y a cumplir más años. Sin embargo, y tal como recuerda Brugal, especialistas en el proceso de maduración, este proceso no es nada malo, sino todo lo contrario, ya que para Brugal es indiscutible que mejoramos con la edad.
La madurez, pues, viene asociada a relaciones más estables, a mayor plenitud y a un estar en la vida más consciente. Por tanto, hay que tratar de derribar todos los mitos negativos asociados a la maduración y disfrutar de esta etapa.