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El juego online, que se puede seguir en cualquier momento y en cualquier lugar, facilita las conductas adictivas. Y el cerebro adolescente, con más tendencia a la impulsividad, tiene más riesgo de caer en la adicción. De ahí que los expertos recuerden que es importante retrasar hasta los 21 años el acceso a las juegos o casas de apuestas. 

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