Es uno de los alimentos más versátiles de la dieta mediterránea y, además, lleno de propiedades saludables. La berenjena es una hortaliza jugosa, que adquiere un gran protagonismo en todo plato en el que se encuentra, tanto por su peculiar textura como por su potente sabor. Eso sí, es un alimento que nunca debe tomarse crudo, ha de estar siempre cocinado para eliminar la acción de la solanina, una de las sustancias que contiene y que puede resultar muy tóxica para nuestro organismo.