La autoestima es el resultado de una percepción sobre nosotros mismos muy a la baja, con muy pocas expectativas de cumplir con un nivel mínimo y con la sensación de que somos continuamente juzgados de forma negativa, y no solo eso, sino que una baja autoestima implica que acabamos considerando que los juicios en negativo que se nos hacen pueden estar en lo cierto.