Pomelos
(3 euros/kilo)
De media el kilo de pomelos de producción nacional puede costar alrededor de 3 euros, por lo que esta es la fruta más barata de esta estación. Este cítrico con sabor muy potente tiene un altísimo contenido en vitamina C. Pero recuerda, para mantener todas las propiedades es mejor cortarlo y exprimirlo justo cuando vayas a consumirlo. La luz, la temperatura y el agua pueden hacer que se oxide y que, por tanto, pierda nutrientes. Además de la vitamina C, el pomelo aporta ácido fólico, que en el caso de estar embarazada podrá convertirse en uno de tus mejores aliados para prevenir los posibles problemas en el tubo neural del bebé.
Piña
(5 euros/kilo)
El 85% de esta fruta es agua, por lo que se trata de un alimento muy bajo en calorías, y rica en vitamina A, B1 y C. Además, aporta hierro y magnesio. Una de las principales propiedades beneficiosas de la piña está en la enzima bromelina, que está en el tallo y que hace que nuestras digestiones sean más suaves y controladas. Esta enzima hace que las proteínas se fragmenten y se conviertan en aminoácidos, por lo que todo el proceso digestivo se simplifica.
Kiwis
(5,85 euros/kilo)
Este cítrico que se originó en las antípodas tiene un alto aporte de vitamina C y además favorece la formación de colágeno. Como otros cítricos, aporta ácido fólico que ayuda además a que nuestras células combaten los radicales libres. Además, previenen infecciones, y evitan la anemia gracias a que favorece en gran medida la absorción de hierro. Y, por si fuera poco, el kiwi también ayuda a luchar contra el colesterol, regulando el malo (LDL).
Albaricoques
(6 euros/kilo)
Esta fruta es rica en antioxidantes, vitamina C y licopeno. Los albaricoques minimizan la probabilidad de sufrir enfermedades cardiovasculares y son perfectos para luchar contra el estrés, pues influyen en el sistema nervioso. Además, reducen el colesterol malo (LDL). Contienen hierro, por lo que se trata de una alimento indicado en casos de anemia, ya que fomentan la producción de hemoglobina.
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Nísperos
(6,58 euros/kilo)
Esta fruta tiene una textura muy agradable y un sabor suave. El níspero es muy rico en fibra soluble, pectina, que hace que el colon mantenga la humedad y de esta forma el níspero se convierte en una muy buena alternativa laxante. También previene el cáncer de colon, pero sus beneficios se extienden al sistema circulatorio, pues los nísperos reducen los niveles de colesterol y ayudan a la reabsorción de la grasa para su posterior expulsión. Además, es fuente de vitamina A y, por lo tanto, cuida de nuestra piel y mucosas.
Ciruelas
(7,78 euros/kilo)
En primavera llegan las primeras ciruelas del año, pero es una fruta que nos acompañará durante mucho tiempo, hasta bien avanzado el verano. Es famosa por su alto contenido en fibra, que ayuda a regular el tránsito intestinal y son, por tanto, unas aliadas fieles contra el estreñimiento. Tienen un alto aporte de potasio y de antocianos, que son unos pigmentos de la fruta con alto poder antiséptico y antioxidante.
Cerezas
(9,75 euros/kilo)
Esta es una de las tres frutas más caras de la primavera. Las cerezas ya eran utilizadas en épocas antiguas como depurador intestinal natural, y a día de hoy ya conocemos con certeza que se trata de una fruta que añade muchos beneficios detox a nuestra dieta. Esto se debe a su color rojo, pues contiene antocianinas, que son unos pigmentos de la familia de los flavonoides que aportan cualidades depurativas a nuestro organismo.
Fresones
(10 euros/kilo)
Los fresones son la segunda fruta más cara de la primavera. Ahora España es el principal productor de fresón de Europa y el segundo del mundo, pero esta fruta llegó de América en el siglo XIX. Los fresones de Huelva son de una gran calidad y se exportan a todo el mundo. Esta fruta tiene muy pocas calorías y aporta muchas sales minerales como el potasio, el magnesio y el calcio. Además, es fuente de vitamina C y E. La digestión de esta fruta es suave, por lo que resultan muy nutritiva y hace que aumenten las defensas de la flora intestinal.
Arándanos
(13,70 euros/kilo)
Llegan a final de la primavera y se mantienen en el mercado hasta diciembre. Se trata de una fruta silvestres muy delicada, de ahí su alto precio. Son fuente de fibra, vitamina C y potasio. De la misma manera que las cerezas y las ciruelas, el color morado de los arándanos denota sus beneficios más codiciados, pues contiene un pigmento natural con poder antiséptico, el antociano, y en este caso se concentra en prevenir las infecciones urinarias.
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