No te extrañes si notas como tu estado de ánimo sufre altibajos, si te notas más sensible, de peor humor, e incluso te duele la cabeza sin que encuentres una explicación aparente para ello. Además de cualquier otro motivo que puedas tener, es muy posible que los cambios metereológicos le estén jugando una mala pasada a tu estado anímico y físico.