Las lentillas desechables están ganando terreno a las reutilizables y a las gafas. Aportan muchas ventajas para su uso, han bajado de precio sensiblemente en los últimos años, y no requieren mantenimiento ni preocuparnos con guardarlas. Además, es más improbable que "salten" del ojo y haya que buscarlas a tientas por toda la habitación. En suma, las lentillas desechables son un producto en auge que cada vez se consume y se fabrica más.