Las abejas trabajan sin que nadie les coordine
Tomando como ejemplo las colonias de abejas o de hormigas, los investigadores han tratado de entender cómo la sostenibilidad del planeta podría afianzarse siguiendo pautas de “inteligencia colectiva”. En el caso del ser humano, existe una comunicación global que nos alerta sobre el deterioro del planeta y nos informa de cómo podemos evitarlo. Está en nuestra mano activarnos como “abejas” que colaboran con un fin común, o disolver esa unión.