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Cuida el aporte de minerales

Evita las temidas anemias que tanto afectan a las mujeres (ya sea por la menstruación, embarazo o carencia nutricional.) asegurando el aporte necesario de hierro al organismo. Si este falta, lo normal es que sintamos fatiga y cansancio sin causa aparente, además de la ya nombrada anemia. El cuerpo absorbe con más facilidad el hierro procedente de la carne, las aves y el pescado, que el de las verduras, cereales y frutas. Para ayudarle a obtener la máxima absorción, es conveniente ingerir alimentos ricos en vitamina C, como las naranjas o tomates,  junto a los que contengan hierro.

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Las vitaminas que no pueden faltar

La vitamina C es la más demandada cuando bajan las temperaturas. Si bien no sirve para “curar” infecciones, sí es una buena ayuda para nuestras defensas. Además, la vitamina C es un poderoso antioxidante que protege a nuestras células corporales. La vitamina C se encuentra en las frutas cítricas (como naranjas y pomelos), y en verduras como los pimientos y el brócoli.

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