No todo lo light es saludable
Cuando un producto se define a sí mismo como light o con 0% de azúcares o grasas, está sirviendo a un doble propósito. Nos informa de sus valores nutricionales (aunque no siempre es real), y a la vez nos hace sentir que hemos consumido bien y que estamos pagando algo más de dinero por un producto que no nos acarreará un placer culpable. Es decir, solo por su nombre y etiquetado, descarga nuestra responsabilidad de consumirlo.