La donación de médula ósea que, en realidad, -denominada correctamente trasplante de progenitores hematopoyéticos (células madre)- se realiza, generalmente, mediante la obtención de estas a través de sangre periférica, una forma menos lesiva y agresiva, ya que se efectúa mediante una simple punción en las ventas de los antebrazos, como si se tratara de un análisis de sangre.