1/1 © iStock

Las chanclas son un calzado muy apropiado para ir a la playa, siempre que esta sea de arena, y para proteger los pies en piscinas y baños públicos. Sin embargo, no se han diseñado para el asfalto ni para caminar grandes distancias. Su uso continuado puede producir fascitias plantar y otros problemas en el pie y en la espalda. 

Más sobre: