Puede que el aspecto de la raíz de jengibre, pequeña y redondeada y de color marrón, no te resulte apetecible, pero posee muchísimas propiedades medicinales y culinarias que la hacen muy valiosa. Tiene un sabor fresco y picante que lo hace inconfundible, y es una muy buena fuente de potasio, vitamina C, magnesio, cobre y manganeso.