6. Nueces de macadamia: demasiado grasas
No hay que abusar de este tipo de fruto seco ya que contiene mucha grasa y le puede costar digerirlas. "Los perros son animales carnívoros, no omnívoros como nosotros, por lo que les puede costar más digerir los alimentos. Además, también hay que tener en cuenta el peso del animal. Un puñado no es lo mismo para un perro de raza grande que para otro pequeño de dos kilos", señala Félix Vallejo.
Por otro lado, "los frutos secos contienen aceites saludables como los omega 3,6 y 9 que protegen la salud de su corazón, piel, articulaciones e, incluso, cerebro", asegura la vicepresidenta de la Fundación Trifolium. "Los perros pueden tomar frutos secos como nueces, avellanas o las almendras, pero sin excedernos", matiza el veterinario.