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¿Sabías que la salud de tus dientes afecta a tu rendimiento deportivo? Según un estudio realizado por el doctor Dario Vieira Pereira y el equipo de Cirugía de la Universidad de Barcelona en el que se evaluó a 30 jugadores del primer equipo del FC Barcelona, las personas que practican algún deporte suelen sufrir más problemas dentales que el resto de la población como caries y desgaste dental debido a la deshidratación, la ingesta de hidratos de carbono o de bebidas azucaradas (como las bebidas isotónicas); pero también dolores musculares y articulares a causa de una mala alineación dental, sangrado bucal o una masticación incorrecta... De hecho se estima que cerca de un 30% de los dolores musculares de cuello y espalda está relacionado con este último motivo. Así que, si eres deportista, el mensaje clave es: cuida tu salud bucal, comenzando por una alimentación saludable. Porque somos lo que comemos, pero también lo que no comemos.

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Manzana, uvas o fresas, son claves.

El doctor Iván Malagón, director de Iván Malagón*Clinc (www.ivanmalagonclinic.com), nos ayuda a descubrir los beneficios o los perjuicios que los alimentos aportan a nuestros dientes para comer con salud. Entre ellos, las frutas son fundamentales. Por ejemplo, la manzana, junto con la pera, la sandía o el kiwi, ayudan a limpiar la superficie de los dientes y encías. Las uvas y los limones son los mejores amigos para conseguir una sonrisa blanca, ya que tienen efecto blanqueador natural. No olvides las fresas, porque contienen Xylitol, que ataca directamente a las bacterias de la placa dental y evitan la desmineralización de la dentadura.

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Verduras: vegetales crujientes

Ayudan a retirar de los dientes los restos de otras comidas que acaban produciendo manchas. No te olvides de la zanahoria y el rábano, al igual que las manzanas, limpian la placa bacteriana de los dientes y eliminan los restos de otros alimentos. Para combatir la halitosis el apio no puede faltar.

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Lácteos

El yogur, la leche o el queso son blanqueantes naturales, limpian los dientes y combaten el mal aliento, gracias, principalmente, al efecto del ácido láctico.

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Alimentos ricos en fósforo

Debemos consumir alimentos ricos en fósforo porque, como el calcio, es fundamental para la estructura de los dientes. El fósforo se encuentra en los huevos, la leche, el pescado, las legumbres, las nueces o los calabacines.

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Infusiones

En tus desayunos opta por el té verde, una bebida que combate las enfermedades de las encías. Además, tiene propiedades antioxidantes y, acompañado de cereales, ayudas a la protección contra la periodontitis.

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Chocolate: ¡date un capricho!

Hay unos alimentos que aparentemente parecen muy perjudiciales para nuestra salud y para nuestros dientes, pero se ha demostrado que varios de estos ‘alimentos prohibidos’ cuidan nuestra boca. El chocolate y la cerveza, consumidos con moderación, aporta muchos beneficios a nuestra salud bucal. Por ejemplo, el chocolate contiene un componenete, la teobromina,que ayuda a mineralizar el esmalte reduciendo así la sensibilidad dental. Y la cerveza rubia, sobre todo si es artesanal, provee al organismo de nutrientes esenciales para la fortaleza de la dentadura, como el silicio y el calcio. Además contienen más lúpulo, un componente antioxidante que ayuda a combatir las bacterias y hongos que dañan la boca.

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Especias: perejil, albahaca, menta...

Qué mejor que aportar sabor a nuestros menús con condimentos, y si encima son saludables para nuestra salud, mucho mejor. Muchas especias ayudan a combatir efectos negativos de otros alimentos, como es el caso de el perejil, albahaca y la menta, que contrarrestan el efecto del ajo y la cebolla y el jengibre (consumido en dosis pequeñas) y neutralizan el mal olor.

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¿Cuáles son los alimentos enemigos de los dientes?

A la hora de llenar la cesta de la compra, hay algunos alimentos de los que debes intentar no abusar. Las patatas fritas de bolsa, que desgastan el esmalte; el vino tinto, que contiene pigmentos que pueden machar los dientes; los azúcares, porque producen caries; los alimentos o bebidas muy fríos o muy calientes, porque producen sensibilidad dental; las bebidas carbonatadas, que desmineralizan el esmalte.

Recuerda que cuidarse y tener buenas rutinas es un básico para tener una buena salud. ¡Empezando por la boca!

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