Hace tan solo unas semanas que la reina Sonia de Noruega se sometía a una intervención para implantarle un marcapasos, como solución a un problema coronario (en concreto una fibrilación auricular). Se da la casualidad de que su esposo, el rey Harald de Noruega, también lleva implantado dicho dispositivo. Ambos se han visto obligados, por sus problemas de salud, a someterse a esta intervención que tiene como objetivo mejorar el ritmo cardiaco.
¿Qué es un marcapasos y de qué forma actúa?
Lo primero que tenemos que tener en cuenta es qué es exactamente un marcapasos y cómo actúa. “Es un dispositivo médico que se implanta en el pecho para ayudar a regular los latidos del corazón cuando este no funciona de manera adecuada. Este aparato está diseñado para enviar impulsos eléctricos al corazón, estimulándolo para que mantenga un ritmo normal y estable”, nos detalla el doctor Tomás Datino Romaniega, presidente de la Asociación del Ritmo Cardiaco de la Sociedad Española de Cardiología (SEC) y Jefe de la Unidad de Arritmias de los Hospitales QuironSalud Madrid y Ruber Juan Bravo.
“Así, nos explica que el dispositivo consta, generalmente, de dos partes principales: un generador de impulsos y unos cables llamados electrodos. El generador de impulsos es una caja metálica que contiene una batería y un circuito encargado de monitorizar la actividad del corazón y producir impulsos eléctricos cuando es necesario. Los electrodos son cables flexibles que conectan el generador al corazón, llevando los impulsos eléctricos directamente al músculo cardíaco. Hoy día existe un tipo de marcapasos que no tienen electrodos y se implantan directamente dentro del corazón”, detalla el experto, que matiza que el funcionamiento del marcapasos es bastante sencillo: cuando el marcapasos detecta que el ritmo cardíaco es demasiado lento o que hay una pausa anormal, envía una señal eléctrica para estimular el corazón.
En el registro nacional de marcapasos, la edad media a la que se implanta un marcapasos en España es de unos 78 años (es decir, la mayoría de los pacientes portadores de marcapasos tienen más de 75 años).
¿En qué casos está recomendada la implantación de un marcapasos?
El miembro de la SEC indica que en condiciones normales, el corazón tiene su propio sistema eléctrico natural, que controla los latidos y asegura que se mantengan en un rango adecuado. “Sin embargo, ciertas condiciones, como una frecuencia cardiaca demasiado lenta (bradicardia) o fallos en el sistema eléctrico natural del corazón, pueden provocar problemas serios, como mareos, fatiga extrema, dificultad para respirar o incluso desmayos. Es aquí donde el marcapasos se convierte en una herramienta vital”, apunta.
¿Es compleja la intervención para implantarlo?
Cuando a un paciente le indican que han de implantarle un marcapasos, no es extraño que aparezca cierta incertidumbre y algún miedo. Cualquier intervención provoca respeto, y más aún en el caso de que hablemos del corazón. “No suele ser una intervención demasiado compleja”, anticipa el doctor, que detalla a continuación cuál es el proceso.
- Normalmente se colocan uno o dos electrodos que se avanzan a través de venas del miembro superior a la parte derecha del corazón (guiados por rayos X).
- Los electrodos se conectan al generador que se coloca en la parte alta del tórax debajo de la piel.
- El procedimiento se termina tras cerrar la piel con puntos de sutura o grapas.
“La intervención puede realizarse con anestesia local, aunque también puede utilizarse sedación o incluso anestesia general según cada caso. En total suele durar en torno a 1 hora. Los marcapasos sin cables se avanzan al corazón por una vena de la pierna (o del cuello) sin necesidad de puntos de sutura en la piel, en un procedimiento incluso de menor duración”, apunta el especialista.
¿Cuál es el tiempo de recuperación?
Tras la intervención para implantar el marcapasos, el paciente suele permanecer un día ingresado. “En las primeras dos semanas suele revisarse la herida (y retirase grapas o puntos si es necesario). Generalmente, la recuperación es completa pasadas 3-4 semanas”, indica el doctor Tomás Datino Romaniega.
¿Qué implicaciones tiene vivir con un marcapasos?
Cuando el proceso se completa y el marcapasos se implanta, nos preguntamos qué implicaciones tiene para el paciente. “La persona portadora de un marcapasos puede llevar una vida completamente normal, sin necesidad de cambiar la dieta, pudiendo practicar deporte y conducir vehículos. De hecho, lo ideal es prácticamente olvidarse de que lleva puesto un marcapasos (salvo por las revisiones) y recuperar sus rutinas habituales”, explica el doctor.
¿Debe tener alguna precaución especial quien lo porta?
Lo que sí que es cierto es que los portadores de marcapasos deben tener en cuenta algunas precauciones, que el doctor nos resume en las siguientes:
- Debe evitarse que el generador debajo de la piel se exponga al sol durante tiempos prolongados (es metálico).
- En el domicilio, la mayoría de los electrodomésticos no causan problemas; solo deben mantenerse alejados de la cocina de inducción.
- Los móviles raramente producen interferencias, pero es recomendable hablar con el móvil en el oído contrario al que se lleva el marcapasos.
- Los arcos detectores de metales (aeropuertos, bancos, etc) no alteran el marcapasos, pero es necesario indicarlo al personal correspondiente, para no generar alertas.
- En los hospitales algunos tratamientos o pruebas diagnósticas pueden interferir con el marcapasos. La más típica es la resonancia magnética. En todo caso, siempre debe indicarse al personal sanitario que uno es portador de marcapasos, para que se tomen las medidas pertinentes en cada caso.
¿Cuándo hay que hacer revisiones?
Tal y como nos explica el cardiólogo, las revisiones suelen hacerse cada 6-12 meses. “Hoy en día, pueden realizarse las revisiones “a distancia” (desde el propio domicilio del paciente) mediante distintos sistemas que se le entregan al paciente para transmitir la interrogación del marcapasos. En esos casos podemos espaciar más las revisiones presenciales”, apunta.