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mujer joven mirándose al espejo tras una operación de nariz© Adobe Stock

¿Dificultad para respirar? La rinoplastia ultrasónica puede ayudarte a solucionar este problema

Es una técnica que no solo se usa con fines estéticos, sino que también es una alternativa para solucionar posibles problemas respiratorios. Hablamos con un experto sobre las diferencias con la técnica tradicional


24 de enero de 2025 - 12:56 CET

En las últimas semanas, la intervención de nariz de Lucas, componente del dúo musical Andy y Lucas, ha estado en el punto de mira. En ocasiones, y por distintos motivos, las cirugías de este tipo, pueden dejar resultados que no son los esperados. Por ese motivo, lo más importante es elegir bien el profesional, la técnica adecuada  y seguir las recomendaciones pre y postoperatorias. Los avances no paran de multiplicarse y, sin duda, en el campo de las intervenciones de nariz, las rinoplastias ultrasónicas han ido ganando terreno, por sus múltiples beneficios. De hecho, se convierten en una alternativa muy interesante en el caso de tener que someternos a una operación para solucionar problemas respiratorios de los pacientes. De todo ello hemos querido hablar con el doctor Diego Casas, otorrinolaringólogo y especialista en rinoplastia ultrasónica a nivel nacional. 

¿En qué casos está recomendada la realización de una rinoplastia ultrasónica?

La rinoplastia ultrasónica es la cirugía que cambia el aspecto externo de la nariz. Por tanto, dado que no existen contraindicaciones absolutas para este tipo de cirugía, podría recomendarse a prácticamente cualquier persona que deseara mejorar o cambiar la apariencia de su nariz, y conseguir así una mejor armonía facial. Además, al tratarse la nariz de una estructura con repercusión tanto estética como funcional a la hora de respirar, la rinoplastia podría indicarse especialmente a aquellas personas con algún problema de respiración, que desean mejorar su respiración mientras se armoniza el aspecto externo.

Con esta intervención habrá menos inflamación y, en consecuencia, menos dolor y recuperación más rápida

Doctor Diego Casas, otorrinolaringólogo

¿En qué consiste la técnica de la rinoplastia ultrasónica?

La técnica ultrasónica es un método que permite moldear el hueso con un terminal que funciona con ultrasonidos o, lo que es lo mismo, con vibración. Esa vibración permite cortar exclusivamente el hueso y es totalmente inefectiva en tejidos blandos como podrían ser ligamentos, músculos o piel. Eso permite actuar solo sobre el hueso, y proteger del daño el resto de estructuras blandas. Por tanto, habrá menos inflamación y, en consecuencia, menos dolor y recuperación más rápida en última instancia.

¿Qué tipo de anestesia se requiere?

Aunque la cirugía de rinoplastia se podría realizar tanto con anestesia local como con anestesia general, se puede afirmar de manera categórica que la anestesia general es la técnica anestésica más segura y con máximas garantías a la hora de realizar este tipo de procedimientos. Duerme al paciente por completo, lo cual permite que el paciente no sienta dolor o se entere de la manipulación, como sucede con la anestesia local. Además, la anestesia general permite un control absoluto tanto de la vía aérea como demás constantes y procesos vitales del paciente, monitorizando en todo momento todos los parámetros, y ofreciendo la posibilidad al anestesista de influir en ellos con medicación cuando lo requiere, manteniendo todo en el rango óptimo que se desea.

En la técnica ultrasónica se utiliza el terminal de ultrasonido que, mediante vibración y sin ejercer prácticamente presión

Doctor Diego Casas, otorrinolaringólogo

¿Cuáles son sus diferencias con una rinoplastia tradicional?

Tanto la técnica ultrasónica como la tradicional tienen los mismos objetivos a la hora de esculpir y dar forma a las estructuras de la nariz, pero los instrumentos que se utilizan son totalmente diferentes. En la técnica tradicional se utiliza cincel y martillo, que suelen resultar agresivos y menos precisos al requerir del uso de la fuerza, y en la técnica ultrasónica se utiliza el terminal de ultrasonido que, mediante vibración y sin ejercer prácticamente presión, conseguirá el mismo resultado que los anteriores, pero de manera más predecible y menos traumática.

mujer en la consulta de un cirujano plástico, preparándose para una intervención de nariz© Getty Images

¿Qué beneficios tiene con respecto a la técnica tradicional?

Debido a que la técnica ultrasónica actúa mediante el motor de vibración que solo es efectiva en la superficie calcárea del hueso, no tiene posibilidad de dañar las estructuras blandas como podrían ser ligamentos, músculos o piel. De esta manera, la inflamación inicial tras la cirugía es mínima, a diferencia de la rinoplastia tradicional, donde era muy característica la inflamación a veces completa de la cara, con amplios hematomas en los ojos, o que requería el uso de taponamiento nasal para contener sangrados, que con la técnica ultrasónica son prácticamente inexistentes.

Es una técnica que resuelve problemas más allá de la estética, ¿no es así?

En efecto. Al tratarse la nariz de una estructura con gran impacto en la armonía facial, y a su vez realizar la importante función de la ventilación nasal, cualquier manipulación en esta zona de la cara tendrá repercusión tanto en el aspecto estético del paciente como en el acto funcional a la hora de tomar aire.

Cualquier manipulación en esta zona de la cara tendrá repercusión tanto en el aspecto estético del paciente como en el acto funcional a la hora de tomar aire.

Doctor Diego Casas, otorrinolaringólogo

¿Puede ayudar a las personas que tienen problemas que hacen que respiren mal?

Así es. En la rinoplastia se cambia el aspecto externo de la nariz, pero lo que no todo el mundo sabe es que el pilar fundamental que sostiene y da estructura a esa forma nueva de la nariz, es el septo nasal o tabique, y los injertos o fragmentos que se utilizarán para dar forma y estructura a la nueva nariz, se obtienen de él. Lo que coloquialmente se conoce como tabique no es más que la lámina de cartílago que internamente separa ambas fosas nasales, y cuando este cartílago está desviado, puede obstruir alguna de las fosas nasales.

Lo que buscamos con una rinoplastia es fundamentalmente corregir ese cartílago interno desviado que dificulta la respiración, retirar esa parte que provoca la obstrucción, y “trocearla” en pequeños fragmentos de cartílago que nos servirán para dar una nueva forma a la punta de la nariz, levantarla y sujetarla en la nueva posición estética que nos interese. El objetivo sería por tanto siempre una mejora estética externa, basada en una adecuada estructura interna de la nariz que funcione de la manera más óptima posible.

¿Cómo deben ser los cuidados antes y después de una rinoplastia ultrasónica?

Antes de la cirugía no suele haber ninguna preparación ni cuidados previos, salvo algún reajuste de medicación personalizado que pudiera indicar el anestesista.

Respecto a los cuidados y tratamiento tras la rinoplastia, al igual que en cualquier otro procedimiento quirúrgico, se buscará fundamentalmente prevenir la infección mediante el uso de antibióticos. La administración de antiinflamatorios buscará reducir la leve inflamación que pudiera surgir consecuencia de la intervención y los analgésicos se encargarán de reducir el dolor y molestias en la zona.

Se puede recurrir a medicación más específica de la zona tratada, como puede ser el uso de antihistamínicos para prevenir la producción de secreciones y molestias nasales. Y, sin duda, en casos de tratamientos postoperatorios muy amplios, siempre será interesante proteger al paciente con algún tipo de protector gástrico con el fin de reducir el impacto que pueda hacer tanta medicación a nivel gastrointestinal.

Sumado a todo ello, no hay que dejar de lado los cuidados no médicos tras la cirugía, que irán orientados sobre todo a mantener la limpieza de la zona operada y prevenir a nivel local la infección de la herida quirúrgica.

¿Cuándo son visibles los resultados de esta intervención?

En el caso de la rinoplastia, la técnica ultrasónica, al conllevar menos inflamación, permite alcanzar de manera visible los resultados finales con mayor celeridad. La nariz alcanza el máximo punto de inflamación durante la primera semana tras la cirugía, y a partir de allí, comienza un paulatino proceso de desinflamación. Con el paso de los meses la nariz va ganando más y más definición conforme va desapareciendo el edema, haciendo que el resultado mejore por momentos. Aunque la desinflamación se produce casi por completo entre los tres y seis meses tras la cirugía, no podremos hablar de resultado definitivo hasta alcanzar el año, cuando la nariz ha sanado por completo.

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