¿No puedes respirar por la congestión? Este remedio te ayudará y descansarás mejor

Durante la temporada de gripe y resfriados como la que estamos viviendo es frecuente que acabemos con una congestión nasal que no nos deje descansar bien. Afortunadamente, podemos recurrir a los consejos de la abuela y echar mano de remedios naturales como el eucalipto que nos ayudará a descongestionar las vías respiratorias. La farmacéutica Meritxell Martí (@farmaciameritxell) nos explica todo lo que necesitamos saber para poder usar esta planta medicinal para aliviar los síntomas del resfriado o la gripe. 

¿Por qué el eucalipto para la congestión nasal?

El eucalipto es ampliamente reconocido por su capacidad para aliviar la congestión nasal. Esto se debe principalmente a su acción antiinflamatoria y mucolítica, que facilita la eliminación del moco acumulado, mejorando así la respiración. Además, sus propiedades antisépticas ayudan a combatir bacterias, mientras que su característico aroma mentolado proporciona una sensación refrescante que contribuye a una respiración más cómoda. El eucaliptol, presente en una alta concentración, es el principal responsable de estos efectos tan beneficiosos para las vías respiratorias.

Los componentes del eucalipto no solo ayudan a mejorar la salud respiratoria, sino que también poseen capacidades antimicrobianas y antiinflamatorias

El eucalipto, con su característica textura oleosa y aroma intenso, destaca por contener compuestos esenciales que le otorgan múltiples propiedades beneficiosas. Estos componentes no solo ayudan a mejorar la salud respiratoria, sino que también poseen capacidades antimicrobianas y antiinflamatorias. Entre sus elementos más destacados se encuentran los terpenos y terpenoides, siendo el principal el eucaliptol. Este compuesto, presente en una concentración del 70% al 85%, tiene propiedades antiinflamatorias, expectorantes y antimicrobianas.

Otros componentes importantes incluyen el alfa-pineno, con efectos antiinflamatorios y broncodilatadores, y el limoneno, conocido por su acción antimicrobiana. Este último también se encuentra en sustancias como los cítricos, la menta o la albahaca. Además, el alfa-terpineol, un monoterpeno, se destaca por sus propiedades sedantes, antimicrobianas y antiinflamatorias. También se identifican terpenos de mayor tamaño, como el globulol y el viridiflorol, junto con otros compuestos secundarios como el geraniol y el citronelol, que aportan efectos insecticidas y antisépticos en pequeñas cantidades.

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Cómo se usa el eucalipto para aliviar la congestión nasal

El método más común para utilizar el eucalipto es mediante inhalaciones de vapor. Basta con añadir unas gotas de aceite esencial al agua caliente para aprovechar sus propiedades. También se utiliza en difusores para llenar el ambiente con su aroma. En farmacias, es habitual encontrar cremas o ungüentos con base de vaselina, que permiten aplicar el eucalipto directamente en las zonas respiratorias, como la nariz o el pecho. Ejemplos de estos productos incluyen la vaselina mentolada o el popular Vicks VapoRub.

El uso más común para utilizar el eucalipto es mediante inhalaciones de vapor. Sin embargo, también se puede usar en difusores o en ungüentos a base de vaselina 

Otra forma de uso es mediante aguas para el lavado nasal, especialmente formuladas para limpiar y desinfectar las fosas nasales. Aunque también se encuentra en jarabes, estos deben contener bajas concentraciones de eucalipto para evitar efectos secundarios como irritación o toxicidad hepática en dosis elevadas. Por último, los caramelos o pastillas con eucalipto son una opción común, aunque su acción es menos efectiva que la de los sprays nasales o las cremas debido a su menor concentración.

Efectos secundarios del eucalipto y precauciones

El uso del eucalipto en dosis normales es seguro para la mayoría de las personas. Sin embargo, en altas concentraciones puede causar irritación, ardor, dolor de cabeza, nerviosismo, mareos o náuseas. En individuos alérgicos, es posible experimentar picores, irritación o lagrimeo. Está contraindicado en niños menores de 2 años, personas asmáticas, epilépticas o con trastornos convulsivos, así como en mujeres embarazadas o en período de lactancia.

El eucalipto no es para todos. Las personas con enfermedades hepáticas graves deben evitar su uso ya que en dosis elevadas puede ser tóxico. 

Además, quienes padecen enfermedades hepáticas graves deben evitar el uso de eucalipto, ya que su principal componente, el eucaliptol, se metaboliza en el hígado y puede ser tóxico en dosis elevadas. En caso de formas ingeridas, como jarabes, no se recomienda su uso en personas con problemas digestivos, como úlceras. Es fundamental emplear siempre aceites esenciales de forma diluida para minimizar riesgos.

¿Sirve el eucalipto para todas las causas de congestión nasal?

El eucalipto no es eficaz en todos los casos de congestión nasal. Por ejemplo, no se recomienda su uso en condiciones como el broncoespasmo, ya que no resulta adecuado para tratar este tipo de afección. Tampoco es útil cuando la congestión se debe a problemas físicos, como una desviación del tabique nasal o la presencia de pólipos, ya que estos casos requieren tratamientos específicos. En casos de rinitis alérgica o rinitis medicamentosa, el eucalipto tampoco es efectivo, ya que estas afecciones tienen causas distintas que deben ser abordadas con otros tratamientos.

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Combinaciones del eucalipto con otros ingredientes naturales

El eucalipto por sí solo es altamente efectivo, pero puede potenciarse al combinarlo con otros ingredientes naturales. Por ejemplo, el mentol, el alcanfor y el pino son complementos habituales en formulaciones para aliviar la congestión. También se puede mezclar con romero y lavanda, conocidos por sus propiedades relajantes y antiinflamatorias, o con tomillo y jengibre, que ofrecen acciones expectorantes y antiinflamatorias, respectivamente.

En sprays nasales, es común encontrar ingredientes como la sal marina, que limpia las vías respiratorias gracias a su acción osmótica, o el própolis, con propiedades antibacterianas. El ácido hialurónico también se incluye en estas formulaciones para hidratar y proteger las fosas nasales. Estas combinaciones refuerzan los beneficios del eucalipto y mejoran su eficacia.