Desde el punto de vista astrológico, esta tercera década del siglo XXI, es absolutamente histórica. No es habitual que en una sola década se den la serie de configuraciones astrales que se dan en esta ocasión. Por eso estamos viviendo tiempos tan inciertos, tan cambiantes y distópicos. A pesar de lo cual, no hay motivos para el miedo ni para pensar en una hecatombe en 2025, más allá del tipo de problemas que ya existen en el mundo y otros similares que puedan darse.
Confucio dijo: “estudia el pasado si quieres pronosticar el futuro”, y precisamente de eso se encarga la astromundial, especialidad sublime de la astrología, que estudia la evolución de la historia basándose en los ciclos astrales y sus diferentes configuraciones. Pero tengamos en cuenta que los astrólogos no somos adivinos ni videntes, sino estudiosos de nuestra relación con el cosmos.
🌌✨ PLUTÓN EN ACUARIO, LA NUEVA HUMANIDAD
Uno de los cambios planetarios más importantes de esta década es la entrada de Plutón en Acuario (que será definitiva en noviembre de este mismo año 2024), algo que no ocurría desde hace unos dos siglos y medio, en tiempos de la Revolución Francesa.
Plutón transitará por Acuario durante los próximos veinte años, que pueden ser revolucionarios en muchos ámbitos y, desde luego, traen un gran cambio de paradigmas en la sociedad, la cultura, la política, la economía, la sexualidad… Vienen tiempos de una nueva humanidad y habrá que espabilar.
Plutón representa el Ave Fénix, es decir, la muerte para la posterior regeneración. De ahí que estemos viendo caer altas instancias, organismos y personajes estos últimos años, como preparación para el cambio, para ese renacer.
Un cambio que también debemos acompañar a nivel individual, puesto que este tránsito (reforzado con la definitiva entrada de la Era de Acuario, cuyo umbral estamos atravesando, haciendo que todo esté cambiando a la velocidad de la luz) empuja al ser humano a tener el valor de descubrir sus verdaderos poderes, como individuos y como sociedad. Lo peor que podríamos hacer con este largo e histórico tránsito es dejarnos vencer por miedos o manipulaciones, o dejarnos arrastrar por la polarización extrema, males de un Plutón mal integrado. Es tiempo de eliminar todo aquello que ya no tiene sentido (hábitos, relaciones, tendencias, pensamientos…) o que supone un lastre para la evolución personal. Y descubrir el propósito de vida.
💔😞 EL GRAN DESENGAÑO
Otro aspecto fuerte del año 2025, que está a punto de empezar y del resto de la década, será la conjunción de Saturno y Neptuno, pasando ahora por Piscis, pero que acabará en Aries.
Una conjunción que se da una vez cada 35 años aproximadamente y que señala una larga etapa de luchas entre los ideales y la cruda realidad, que nos lleva a vivir como si estuviéramos en un limbo entre la vigilia y el sueño, de auténtica confusión, dominada por las fake news, sin poder reconocer los límites entre la verdad y la mentira, como si no pudiéramos creer todo lo que está pasando en el mundo.
Señala tiempos embarrados, abonados a la mentira, el engaño, el fraude y la guerra de desinformación con intereses espurios. Algo que, con frecuencia, conduce a situaciones tramposas y grandes desengaños, a una sociedad que se siente estafada y estancada como en aguas movedizas.
El único modo de integrar bien o trabajar en positivo estos influjos es ser conscientes de la realidad que nos rodea, empezando por nuestra propia realidad, pero sin que eso nos limite o impida luchar por los sueños e ideales, tanto en un sentido personal como por una sociedad más justa.
Se trata de un contacto planetario que tiene una fuerte influencia sobre el ideario (sea político, religioso, etc.) y sobre la espiritualidad. Una conjunción que viene a decirnos, como nos ilustró el autor de El principito, que “lo esencial es invisible a los ojos”.
Y eso que es esencial, como los sueños, las emociones, los ideales… lo tenemos que trabajar. La espiritualidad, al final, acaba condicionando las cuestiones materiales y más prosaicas. Son tendencias que se prolongarán en los próximos años.
💸🚀 LA REVOLUCIÓN ECONÓMICA
La economía también está sufriendo grandes vaivenes e innovaciones, algo que se debe en gran medida al tránsito de Urano por Tauro, donde ya lleva años.
Muestra de ello son las criptomonedas, las CBDC y toda la revolución que se está experimentando en las formas de consumo, ahorro e inversión, así como las formas de ganar dinero a través de las redes sociales y de actividades cada vez más independientes, atomizadas y alejadas de la antigua visión de tener algo seguro, un sueldo o un trabajo fijo para toda la vida.
A pesar de todo lo que se dice sobre la economía, desde el punto de vista astrológico se puede decir que seguirá el ciclo alcista o el crecimiento económico durante el 2025, último año de Urano en Tauro.
🗣️📚 LA COMUNICACIÓN Y EL APRENDIZAJE
Otro gran movimiento astral de 2025 será la incursión de Urano en Géminis, que será temporal, antes de la entrada definitiva en 2026. Abróchense los cinturones, porque, si recientemente hemos asistido a un salto cuántico en el mundo de las comunicaciones, la escritura y la información (por ejemplo, con la irrupción del ChatGPT), lo que viene es mucho más bestial.
Tenemos que prepararnos para aprender, comunicarnos, informarnos y movernos o desplazarnos de otra manera, con otro tipo de herramientas, a otras velocidades…
Una gran revolución de la mente está en marcha, y será mejor no perder el tren. No por ello deberíamos abandonar los libros de toda la vida, las libretas y bolígrafos, pero el salto es a otro nivel. Tanto que puede cambiar hasta la configuración de nuestros cerebros poco a poco.
🇺🇸 ESTADOS UNIDOS
Urano es, por otra parte, un planeta clave en la carta astral y el destino de los Estados Unidos de América, que tiene a este planeta situado precisamente en el signo de Géminis y en el Ascendente, punto fundamental de toda carta astral.
Este planeta vuelve al tercer signo del Zodiaco una vez cada 84 años, y está unos siete años hasta terminar de recorrerlo entero. Pues bien, se da la circunstancia de que cada vez que Urano ha vuelto a Géminis, EE. UU. ha entrado en guerra, como ocurrió en su guerra civil (años sesenta del siglo XIX) y en la II Guerra Mundial (años cuarenta del siglo XX). ¿Qué pasará esta vez?
⛪✨ LA IGLESIA Y LA NUEVA ESPIRITUALIDAD
Neptuno oscilará entre finales de Piscis y principios de Aries durante el 2025, cuando ya empezarán a ser notorios sus influjos en este signo, aunque no entre definitivamente en él hasta el año 2026, para quedarse aquí durante unos trece años. De nuevo, un tránsito histórico abocado a inconmensurables cambios, que serán muy visibles en el ámbito eclesiástico, las religiones y la espiritualidad.
Vienen procesos de apertura y renovación, vientos de cambio que exigirán valentía y que pueden provocar muchas guerras internas en el seno de la Iglesia, pero también externas. La combatividad por motivos o sentimientos religiosos se pondrá a la orden del día.
A nivel individual o personal, este tránsito (vinculado estrechamente con la conjunción de Saturno y Neptuno que hemos visto antes) invita, antes que nada, a revisar nuestros sueños, a continuación, ver si están alineados con nuestras acciones, así como a trabajar las técnicas de visualización activa para alinearnos en tal sentido.
🌪️💪 TIEMPOS REVUELTOS Y PODERES PERSONALES
Otro de los aspectos más destacados del 2025 será el tenso aspecto entre Marte y Plutón, que ya predomina en estos últimos meses de este año 2024 y que puede dar lugar a situaciones muy tensas y a tragedias como la ocurrida recientemente en tierras valencianas, pero en diferentes partes del mundo. Tendencias que se pueden extender hasta mayo.
En el ámbito individual, es tiempo de transformar los miedos en coraje y honestidad, en capacidad de dar lo mejor de nosotros mismos, incluso en los momentos que las cosas se ponen más difíciles, en comprometernos a trabajar en el desarrollo de nuestros poderes personales, por más ocultos que estén.