Estos son los 5 falsos mitos más habituales sobre la meditación

Estamos a punto de dar la bienvenida a un mes especialmente intenso, estresante para muchos. Una etapa en la que la meditación puede echarte una mano para afrontar esos momentos en los que necesitamos encontrar la calma y reencontrarnos con nosotros mismos. Pero tal vez no has probado nunca y, es más, tienes ciertos prejuicios sobre esta técnica que te limitan a la hora de animarte a meditar. Por eso, hemos querido hablar con Tony Espigares, experto en meditación y transformación personal, sobre lo que él considera que es mucho más que una simple técnica de relajación o una práctica espiritual. En su opinión, está al alcance de todos y tiene un poder transformador que va más allá de lo que muchos imaginan. Y para desmentir creencias erróneas que impiden a la gente experimentar sus beneficios, desmonta cinco mitos comunes sobre la meditación.

Falsos mitos sobre la meditación

Pero antes de ahondar en cada uno de los mitos, nos hacemos una pregunta que le transmitimos al experto: por qué piensa que sigue habiendo tantas falsas creencias o mitos relacionados con la meditación. "Durante mucho tiempo, la meditación se ha asociado con lo místico o espiritual, lo que ha hecho que muchas personas la perciban como algo reservado para unos pocos. Pero la meditación es para todos”, apunta.

“Hoy en día, gracias a la ciencia y a experiencias colectivas como las meditaciones en comunidad, muchas de estas creencias se están rompiendo. La meditación es una herramienta accesible y universal para vivir con mayor equilibrio y conexión", nos detalla.

• Mito 1: ‘Meditar es dejar la mente en blanco’. Es, en su opinión, uno de los errores más frecuentes, creer que la meditación exige vaciar la mente. “Nuestro cerebro genera entre 70.000 y 90.000 pensamientos diarios. El objetivo no es eliminarlos, sino aprender a redirigir la atención y observarlos desde una perspectiva más elevada”, señala Espigares. Varios estudios demuestran que la meditación activa la corteza prefrontal, ayudando a regular las emociones y favoreciendo la claridad mental.
• Mito 2: ‘Solo es para personas espirituales o religiosas’. Aunque la meditación tiene orígenes espirituales, sus beneficios no están restringidos a quienes practican una religión. “Hoy sabemos que meditar reduce el estrés, mejora el sistema inmunológico y aumenta la salud mental, independientemente de las creencias personales”, afirma Espigares, apoyándose en investigaciones del Massachusetts General Hospital que confirman la disminución de la actividad en la amígdala, el área del cerebro asociada al estrés.
• Mito 3: ‘Hay que meditar sentado y en silencio durante horas’. “Meditar puede hacerse de muchas maneras: sentado, caminando o incluso tumbado. No se trata de una postura, sino de un estado de conexión”, aclara Espigares. La clave está en crear un espacio donde la energía fluya y la mente se relaje. Más que una actividad puntual, él lo describe como un estilo de vida: “Vivir en meditación es vivir alineado con lo que realmente amamos”.
• Mito 4: ‘Meditar es solo para relajarse’. La meditación puede comenzar con la búsqueda de relajación, pero sus efectos son mucho más profundos. Espigares explica: ‘Meditar mejora la neuroplasticidad, cambiando la estructura del cerebro y potenciando áreas clave como la memoria y la toma de decisiones’. Para él, la meditación es un ‘superpoder oculto’ que desbloquea el potencial humano y conecta con la esencia interior.
• Mito 5: ‘Es una práctica individualista’. Aunque meditar a solas es beneficioso, hacerlo en grupo amplifica los resultados. ‘Cuando meditamos en comunidad, generamos una energía colectiva que potencia la experiencia’, asegura Tony. Según el HeartMath Institute, la meditación grupal puede sincronizar la llamada coherencia cardíaca, una sincronización entre el entorno cardiaco y los estados emocionales que puede mejorar la salud, el rendimiento y el bienestar en general.

© Getty Images

 Por qué deberías probar la meditación

¿Cómo convencería el experto a alguien que nunca ha meditado para que probara los beneficios de esta técnica? Lo primero es tener claros los beneficios de la meditación y el experto nos los describe a la perfección. "La meditación es una práctica sencilla, pero con un impacto profundo. En solo ocho semanas, la ciencia ha demostrado que puede generar cambios reales en tu cerebro y en tu química interna, mejorando aspectos como la gestión del estrés, la ansiedad y el bienestar general. No necesitas ser un experto ni dedicar mucho tiempo; con unos minutos al día, puedes empezar a notar resultados en pocas semanas”, indica.

¿Cómo convencería a alguien que nunca ha meditado para que probara los beneficios de esta técnica? Parte de que meditar es regalarte un espacio para ti, para reconectar y vivir de una forma más consciente y equilibrada. “Para convencer a alguien, compartiría historias reales de personas que han experimentado transformaciones profundas gracias a la meditación. Recuerdo, por ejemplo, a una mujer con depresión crónica que llegó a nuestros encuentros. Después de años de medicación sin resultados, empezó a meditar, a abrazar sus sombras y a vivir más presente. Hoy vive en plenitud y su transformación incluso inspiró a su familia”, nos cuenta.

Además, detalla que meditar en comunidad potencia estos beneficios, porque la energía grupal amplifica la experiencia y te ayuda a profundizar más rápido. “Es un regalo que no solo transforma tu mente y tu cuerpo, sino también tu vida", nos dice.

¿Principales beneficios que nos puede dar la meditación?

• Salir del estado de supervivencia: La meditación reduce el estrés, disminuye los niveles de cortisol y te ayuda a salir del piloto automático en el que muchos vivimos. Es una forma de reconectar contigo mismo, generando calma y plenitud.
• Claridad mental y enfoque: Al meditar, entrenas tu cerebro para estar presente, fortaleciendo conexiones neuronales y mejorando tu capacidad de concentración, memoria y toma de decisiones.
• Conexión con lo sutil: Más allá de los beneficios físicos, la meditación te conecta con tu esencia y con algo más grande. Es un estado de amor y unidad que transforma la forma en que percibes la vida.

"Meditar también puede ser una herramienta para liberar bloqueos, cultivar desde dentro lo que deseas ver fuera y vivir en un estado de plenitud y amor. Es mucho más que relajarse; es un camino hacia una vida extraordinaria", apunta.

¿Todo el mundo está preparado para meditar?

El experto lo tiene claro: “Absolutamente, todo el mundo está preparado para meditar. La ciencia demuestra que todos tenemos la capacidad innata de entrar en estados meditativos”. Eso sí, todo implica un proceso. Al principio, la meditación consiste en enfocar tu atención en algo sencillo, como la respiración o una visualización. Pero con el tiempo, trasciendes tu identidad limitada por el ego, el entorno y el tiempo. Es ahí donde te conectas con algo más grande: una fuente infinita de creatividad y posibilidades”, nos dice.

Cuando se llega al estado de meditación profunda, tu cerebro y corazón entran en coherencia, transformando tu química interna y llevándote a un estado armonioso. “Este proceso es accesible para todos, independientemente de tu experiencia previa. Yo siempre digo que meditar es como entrenar un músculo: al principio cuesta, pero con práctica entras en ese estado de flujo donde la transformación sucede", nos dice.

© Adobe Stock

Muchas formas de meditar

Le planteamos al experto si piensa que puede haber tantas formas de meditar casi como personas y su respuesta también es clara: “Sí, definitivamente. Cada persona encuentra su forma de meditar según sus necesidades y preferencias. Algunas personas prefieren repetir mantras, otras utilizan la respiración o las visualizaciones. Todas estas técnicas son válidas si te ayudan a transformar tu energía y a reconectar contigo mismo”, nos cuenta.

Y nos habla de una opción como la meditación en grupo, que adquiere una dimensión aún más poderosa. “La energía compartida te ayuda a profundizar y sostener la práctica. Pero lo más importante es que encuentres una técnica que te permita cambiar tu energía y que cada vez que termines de meditar sientas ese cambio interno”, comenta. 

"Quien ha experimentado los beneficios de la meditación sabe que siempre puede regresar a ese espacio interno, aunque las exigencias externas lo desconecten por un tiempo. La meditación no es solo un hábito; es una forma de recordar quién eres y vivir enamorado de la vida", concluye el experto.