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mujer pensativa en lo alto de una roca, frente a la montaña

Capacidad de superación: una psicóloga nos explica cómo podemos entrenarla

Es la habilidad de una persona para enfrentarse a circunstancias vitales estresantes y salir fortalecida de ello

5 de noviembre de 2024 - 8:16 CET5 nov 2024 - 8:16 CET

Hay personas que sorprenden por su gran capacidad de superación. Tienen un problema, se les plantean obstáculos en su camino vital y, una y otra vez, salen para adelante. “La capacidad de superación es la habilidad de una persona para enfrentarse a circunstancias vitales estresantes y salir fortalecida de ello. Esto es a lo que llamamos resiliencia”, nos comenta la doctora Rebeca Cáceres Alfonso, directora de Tribeca Psicólogos y profesora de la Universidad Internacional de Valencia.

Personas con una mayor capacidad de superación

Le planteamos a la experta por qué piensa que hay personas que tienen esta capacidad más desarrollada que otras personas, qué factores pueden influir en ello. En su opinión, la capacidad de superación que es lo que podemos llamar resiliencia se relaciona con una combinación de factores internos y externos. “A nivel interno influye la personalidad, la autoestima y la forma en la que interpretamos la realidad y damos respuesta a los problemas. Esto tiene que ver también con factores externos como la manera en la que hemos crecido en los entornos infantiles, principalmente en la familia y en la escuela. En este sentido, también es fundamental hablar de la calidad del apego que hemos tenido en nuestros vínculos a lo largo de la vida”, nos cuenta.

Cuando superamos un desafío, experimentamos un aumento en nuestra confianza y autoestima

Rebeca Cáceres, psicóloga

¿Qué es necesario para alcanzar esa superación personal?

La psicóloga considera que hay 3 factores claves de los que podemos hablar:

Autoconocimiento: Es importante conocernos para poder tener un mapa de nosotros mismos en los diferentes momentos y situaciones de la vida. Esto nos permite identificar los obstáculos que nos impiden avanzar y diseñar estrategias para superarlos.
Mentalidad optimista: Adoptar una mentalidad de crecimiento, creyendo que puede aprender y mejorar de las situaciones. Más allá de eso creer firmemente en uno mismo. Importante separar mentalidad optimista de positivismo tóxico.
Apoyo social: Contar con una red de apoyo familiar y social es fundamental para crecer en las situaciones de adversidad.

¿Cómo influye la capacidad de superación en nuestra autoestima?

En opinión de Rebeca Cáceres, la capacidad de superación tiene una influencia directa en nuestros niveles de autoestima y, en consecuencia, en nuestro éxito. “Cuando superamos un desafío, experimentamos un aumento en nuestra confianza y autoestima. Sentimos que somos capaces de afrontar nuevos retos, lo que refuerza nuestra percepción de valía personal. Este ciclo positivo puede llevarnos a asumir nuevas metas y, con ello, alcanzar mayores niveles de éxito, tanto personal como profesional”, nos explica.

Y añade que, por otro lado, la superación está íntimamente ligada al éxito. “Las personas que son capaces de sobreponerse a las dificultades suelen tener una mayor probabilidad de alcanzar sus metas, ya que consideran que los fracasos son parte del éxito y por ello siguen con firmeza aquello que se proponen”, comenta.

¿Cómo podemos poner a funcionar nuestra capacidad de superación?

Hay personas que seguro que se están planteando de qué forma pueden poner a funcionar su capacidad de superación. “La capacidad de superación se entrena”, nos indica y nos resume algunas de las cosas que podemos poner en marcha para este entrenamiento:

Desarrollar la autocompasión: Tratarse a uno mismo con amabilidad y comprensión cuando enfrentamos dificultades es crucial para no caer en la autodestrucción.
Establecer metas realistas y alcanzables: Dividir los grandes retos en pasos más pequeños y manejables puede ayudar a no sentirse abrumado.
Practicar la gratitud: Reconocer y agradecer los aspectos positivos de nuestras vidas para tener una visión realista de dónde estamos que a veces es fácil perderlo de vista.
Mindfulness y meditación: Tener este hábito ayuda a gestionar el estrés y a centrarnos en el presente.
Entrenar en vulnerabilidad: Reconocernos y ser vulnerables es una de las herramientas más potentes para hacer conexiones reales con nosotros mismos y con los otros. Nos ayuda a ser sinceros y honestos con nosotros mismos.

Es importante recordar que el fracaso es parte del proceso y que la clave está en seguir adelante, incluso cuando las cosas no salen como queremos

Rebeca Cáceres, psicóloga

¿Cuáles son los beneficios de tener una alta capacidad de superación?

Mayor resiliencia: Las personas que son capaces de superar las dificultades son más resilientes.
Crecimiento personal: Cada desafío superado es una oportunidad de aprendizaje y de crecimiento.
Mejora de la autoestima: superar dificultades refuerza ayuda a mejorar nuestra autoimagen.
Satisfacción personal: superar desafíos ayuda también a sentirnos más satisfechos con nosotros mismos y creer más en nosotros.

¿Por qué hay veces en las que tiramos la toalla?

Tenemos claro que una buena capacidad de superación es positiva, conocemos las estrategias para entrenarla, pero, sin embargo, hay ocasiones en las que tiramos la toalla y nos cuesta creer que podemos superar esos altibajos que nos encontramos en la vida. “Solemos tirar la toalla cuando nos sentimos abrumados por la cantidad o el tamaño de los problemas. A veces, las expectativas poco realistas que tenemos sobre nosotros mismos o sobre la vida también pueden hacernos sentir que ‘no somos lo suficiente’ o que ‘no seremos capaces’ de lograr lo que nos proponemos, algo que nos desanima y contribuye a querer abandonar lo propuesto porque no nos sentimos capaces”, nos explica la experta.

Añade, además, que otra razón puede ser el miedo al fracaso o el temor a no cumplir con las expectativas de los demás. “Estos pensamientos limitantes pueden paralizarnos y hacernos dudar de nuestras capacidades. Para superar estos momentos, es importante recordar que el fracaso es parte del proceso y que la clave está en seguir adelante, incluso cuando las cosas no salen como queremos”, concluye.

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