Mujer se inyecta una medicación© Getty Images

Salud

Ozempic, el medicamento contra la obesidad premiado con el Princesa de Asturias

Se trata de un medicamento para la diabetes tipo 2 que se ha visto que también puede ayudar a adelgazar. Pero, ojo, no es válido para todos y no está exento de riesgos y algunos graves. Varias voces expertas nos explican qué es este fármaco, por qué adelgaza y quiénes pueden tomarlo 


24 de octubre de 2024 - 15:31 CEST

Ozempic, el medicamento para la diabetes que también ayuda a adelgazar y que muchas famosas lo están haciendo popular, sigue dando de qué hablar. Mañana, los 'padres' de este medicamento, los científicos Daniel J. Drucker, Jeffrey M. Friedman, Joel F. Habener, Jens Juul Holst y Svetlana Mojsov, recibirán el premio Princesa de Asturias de Investigación, como reconocimiento a sus aportaciones en el campo de la endocrinología. Y es que gracias a su trabajo hoy son posibles medicamentos como el mencionado Ozempic, Wegovy o Mounjauro, sustancias que no solo permiten manejar la diabetes, sino que también son una buena herramienta para combatir la obesidad. Por tanto, se consideran grandes aliados para tratar estas dolencias que pueden comprometer la vida. Eso sí, siempre deben administrarse con supervisión médica. ¿Y cómo funcionan estos fármacos? 

Para ti que te gusta

Lee 8 contenidos al mes solo con registrarte

Navega de forma ilimitada con nuestra oferta

1 año por 49€ 9,80€

Este contenido es solo para suscriptores.

Celebramoscon un 80% de descuento.

Suscríbete 1 año por 49€ 9,80€

TIENES ACCESO A 8 CONTENIDOS DE CADA MES POR ESTAR REGISTRADO.

Recuerda navegar siempre con tu sesión iniciada.

¿Cuántos kilos bajas con Ozempic?

Como explica el Dr. Igor Romaniouk, nefólogo en Vithas Valencia 9 de octubre, el principio activo de Ozempic, por ejemplo, es la semaglutida. Con la dosis apropiada y, como decíamos, supervisado por un especialista, el paciente puede llegar a bajar entre un 10 y un 15% de su peso corporal. Esto significa una pérdida de unos 4 o 9 kg según cada individuo, ya que intervienen varios factores en este efecto: el peso inicial, la dosis administrada y los dos hábitos que no pueden faltar en un plan para adelgazar: dieta y ejercicio. 

Ozempic no solo controla el azúcar en sangre, también ayuda a regular el apetito, con lo que se come menos

¿Cómo funciona Ozempic para perder peso? 

Ozempic trabaja imitando la acción de la hormona GLP-1, que se libera de forma natural en el intestino después de comer. Según el Dr. Igor Romaniouk, este fármaco estimula la secreción de insulina cuando los niveles de glucosa en sangre son altos y reduce la secreción de glucagón, la hormona que eleva los niveles de glucosa en el cuerpo. Además de su acción en la regulación del azúcar en sangre, Ozempic afecta el centro del apetito en el cerebro, ayudando a controlar el hambre y reducir la cantidad de alimentos consumidos.

Este efecto doble, tanto en el control del azúcar como en la reducción del apetito, es lo que lo convierte en un medicamento eficaz tanto para el manejo de la diabetes tipo 2 como para la pérdida de peso.

Sin embargo, la nutricionista Laura Jorge advierte de que, aunque pueda resultar una solución rápida, no se enseña a los pacientes a mejorar sus hábitos alimenticios ni a llevar un estilo de vida más activo. "Es una herramienta, pero no puede reemplazar a una dieta equilibrada y la práctica de ejercicio físico regular". De aquí que sea fundamental consultar con un especialista en endocrinología antes de administrarse este medicamento. 

- Leer también: Berberina: el 'ozempic natural' que sirve para adelgazar

¿Cómo se toma Ozempic?

Este medicamento se administra en forma de inyección subcutánea, una vez por semana. Se puede inyectar en la piel del abdomen, muslo o la parte superior del brazo. La dosis inicial suele ser baja, ya que, de esta manera, se minimizan los efectos secundarios, al menos al principio. Al cabo del tiempo, y siempre bajo criterio médico, la dosis aumentará según la respuesta del paciente. 

El medicamento viene en una pluma precargada que facilita la administración. Es importante que siempre se siga la dosis y las indicaciones proporcionadas por el profesional de la salud.

Hay que destacar, además, que Ozempic no se dispensa libremente en farmacias. Es necesaria la receta médica

Ozempic no es apto para todos y puede tener efectos secundarios muy graves, como una pancreatitis aguda

¿Qué efectos secundarios tiene Ozempic?

Como indica la AEMPS (Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios) los efectos adversos más comunes de Ozempic incluyen náuseas, vómitos, diarrea e hipoglucemia. Se trata de reacciones muy frecuentes, y afectan a más de 1 de cada 10 personas. Las náuseas y la diarrea suelen mejorar con el tiempo, pero es importante tener cuidado con los niveles bajos de azúcar en sangre, especialmente si el paciente está tomando otros medicamentos que no sean sulfonilureas o insulina. Además, algunas personas pueden experimentar indigestión, reflujo, hinchazón, cansancio y, como ya es sabido, pérdida de peso. Estos síntomas tienden a aparecer con mayor frecuencia en los primeros días de uso.

Entre los efectos secundarios más graves de Ozempic y poco frecuentes raros, se encuentra la pancreatitis aguda, que puede causar un dolor intenso y requiere atención médica inmediata (puede sufrirlo 1 de cada 100). También pueden presentarse reacciones alérgicas graves como anafilaxia o angioedema, aunque estas son poco frecuentes, ya que afectan a 1 de cada 1.000 personas. Otros efectos incluyen complicaciones en la visión, especialmente en personas con retinopatía diabética, y reacciones locales en el sitio de la inyección, como irritación o hinchazón.

¿Quién no debe usar Ozempic?

Pese a su popularidad, este medicamento no es apto para todas las personas. Como nos recuerda el Dr. Romaniouk está contraindicado en pacientes con antecedentes de pancreatitis, retinopatía diabética avanzada, o problemas graves de tiroides. Además, no debe ser utilizado por personas con diabetes tipo 1 ni por aquellos que sufren de cetoacidosis diabética, una condición grave caracterizada por altos niveles de glucosa en sangre.

Asimismo, tampoco pueden usarlo personas alérgicas a la semaglutida o a cualquiera de los ingredientes en su composición. Por ello, este fármaco para adelgazar tiene que ser prescrito por un médico que, conociendo el historial del paciente, paute la conveniencia o no de tomarlo, la dosis y el tiempo de tratamiento. 

La opción de Ozempic en pastillas se llama Rybelsus y puede ser una opción para aquellos pacientes que no toleran las inyecciones

¿Se puede tomar Ozempic en pastillas?

Ozempic, como decíamos, es inyectable. Sin embargo, existen presentaciones orales del mismo principio activo, la semaglutida. Es el caso de Rybelsus.  Según el Dr. Carlos Iglesias, director médico de Cegedim Health Data España, Rybelsus tiene un mecanismo de acción similar al de Ozempic y se utiliza principalmente para tratar la diabetes tipo 2, aunque también está siendo recetado para la pérdida de peso en algunos casos. 

Se trata de una opción para aquellas personas que no toleran las inyecciones. 

Ozempic para adelgazar, ¿sí o no? 

Llegados a este punto, nos planteamos si Ozempic es el fármaco ideal para adelgazar. En este sentido, la doctora y psicoterapeuta Marisa Navarro, autora del libro La alimentación emocional, indica que “si su uso no tuviera efectos secundarios, algunos muy graves, estaríamos ante la panacea para adelgazar sin hacer esfuerzo alguno, pero claro esto no es así”.

Además, esta especialista advierte de que “si no hay un cambio de vida hacia unos hábitos saludables, el efecto rebote al dejar de inyectarse el Ozempic es tan rápido como lo ha sido la pérdida de peso o más”. A esto añade que “siendo el Ozempic un fármaco con un precio muy alto, nos encontramos que para estar delgado recurriendo a él, tienes que tener dinero para poderlo pagar, con lo que estamos promulgando que la obesidad y el sobrepeso sea una cuestión de clases sociales. Las personas que puedan costeárselo podrán estar delgadas sin el más mínimo esfuerzo, las demás no”. 

Y es que, a día de hoy, en el sistema de salud español solo es prescrito para aquellos pacientes que realmente lo precisan, diabéticos tipo 2 y obesidad, y siempre con autorización de la inspección médica.