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La Reina Isabel II en la Royal Windsor Cup 2021© Max Mumby/Indigo

Enfermedades

Cáncer de huesos, la enfermedad por la que falleció Isabel II, según Boris Johnson

A raíz de las declaraciones de Boris Johnson preguntamos cómo aparece el cáncer de huesos, como el que parece ser que padeció Isabel II y si suele ser como consecuencia de un tumor primario o una metástasis. Un experto en oncología nos lo aclara. 


3 de octubre de 2024 - 17:11 CEST

La reciente noticia sobre la Reina Isabel II y su supuesta batalla contra el cáncer de huesos, revelada por Boris Johnson en sus memorias, ha despertado preguntas sobre qué implica realmente este tipo de cáncer. Aunque no se ha especificado si la Reina sufría un cáncer de hueso primario o una metástasis, hemos querido hablar con el Dr. Ricardo Cubedo, Jefe de Sarcomas y Cáncer Hereditario de MD Anderson Cancer Center Madrid. Este especialista nos ha dado una visión más clara sobre qué es el cáncer de huesos y cómo se diferencia de otros tipos de cáncer.

- Leer: ¿Qué es un osteosarcoma y cuáles son sus síntomas?

Diferencias entre cáncer de hueso primario y metástasis ósea

De entrada, este especialista indica que una de las principales razones por las que el cáncer de huesos genera confusión es la diferencia entre los cánceres que nacen en los huesos y los que se diseminan hacia ellos desde otros órganos. De hecho, el Dr. Cubedo insiste en que es importante hacer esta distinción: “Cuando hablamos de un cáncer primario de hueso, nos referimos a un sarcoma, que es una entidad completamente distinta a una metástasis ósea”.

El especialista subraya que las metástasis óseas son mucho más comunes que los sarcomas. “El cáncer de mama o de pulmón suele extenderse a los huesos en su fase avanzada. Pero eso no significa que sea un cáncer óseo primario”, comenta. 

Además, el cáncer de hueso que nace directamente en esta parte del cuerpo, llamado sarcoma óseo, es mucho más raro. “El verdadero cáncer de huesos forma parte de la familia de los sarcomas, que son cánceres raros por definición”, explica. Además, el Dr. Cubedo añade que dentro de los sarcomas de hueso hay varias categorías.

- Leer: Shannen Doherty revela que su cáncer se ha extendido a los huesos

Tipos de sarcomas óseos

Tal como nos detalla el oncólogo el sarcoma no es una enfermedad única, sino que existen diferentes tipos: “Tenemos el osteosarcoma, que es el más común y afecta generalmente a los huesos largos de las extremidades; el condrosarcoma, que nace en los cartílagos, y el fibrosarcoma, que se origina en el tejido fibroso del esqueleto”. También menciona el sarcoma de Ewing, una variante menos frecuente, pero igualmente agresiva y que ahora es más conocido gracias a la divulgación que hizo de él la ya fallecida Elena Huelva y que también sufrió el hijo de Ana Obregón. 

“El osteosarcoma, que probablemente es lo que la mayoría de la gente asocia con el cáncer de huesos, tiene dos picos de incidencia: uno en adolescentes y otro en personas mayores”, explica. Este cáncer se caracteriza por su rápido crecimiento y, a menudo, se presenta como un bulto en las extremidades, acompañado de dolor. “Es un cáncer que se disemina rápidamente, sobre todo hacia los pulmones y otras partes del esqueleto”, añade.

Síntomas de la enfermedad

Los síntomas del cáncer de hueso pueden variar dependiendo de la ubicación y el tipo específico de cáncer, pero algunos de los signos más comunes incluyen:

  • Dolor en los huesos o articulaciones: este es el síntoma más frecuente y suele empeorar con el tiempo. El dolor puede ser intermitente al principio, pero se vuelve persistente a medida que el cáncer progresa. A menudo se confunde con dolores de crecimiento o lesiones deportivas en adolescentes y jóvenes
  • Hinchazón: puede haber una inflamación o bulto cerca del área afectada por el tumor. Esta hinchazón puede aparecer semanas después de que el dolor comience.
  • Fracturas espontáneas: en algunos casos, el cáncer debilita tanto el hueso que puede fracturarse con facilidad, incluso con lesiones menores o sin una causa evidente.
  • Dificultad para mover las extremidades: si el cáncer está cerca de una articulación, puede limitar el rango de movimiento y causar rigidez o dificultad para realizar actividades cotidianas
  • Pérdida de peso y fatiga: al igual que en muchos otros tipos de cáncer, los pacientes pueden experimentar pérdida de peso sin razón aparente y fatiga extrema.
  • Otros síntomas sistémicos: en casos más avanzados, el cáncer de hueso puede causar fiebre, sudores nocturnos y debilidad general.

Tratamiento para este tipo de cáncer

El tratamiento del osteosarcoma suele requerir una combinación de cirugía y quimioterapia. “El tratamiento primario es la cirugía para extirpar el tumor, pero, aunque logremos quitarlo, la tasa de recaídas con metástasis es muy alta”, advierte el Dr. Cubedo. Debido a esta agresividad, la quimioterapia se utiliza casi siempre, tanto para reducir el riesgo de metástasis como para tratar aquellas que ya hayan aparecido.

En relación con los avances que ha podido haber en este tipo de cáncer, el especialista de  MD Anderson Cancer Center Madrid lamenta que han sido limitados. “No ha habido avances realmente significativos en los últimos años. Seguimos utilizando quimioterapias convencionales que llevan mucho tiempo en uso”, señala. 

Pero a pesar de la rareza de esta enfermedad y de su resistencia a los tratamientos, se continúa investigando para encontrar terapias más eficaces.

- Leer: Los avances más importantes en cáncer

El futuro del cáncer de huesos

A pesar de las dificultades en el tratamiento del cáncer de huesos, el Dr. Cubedo se muestra optimista con respecto al futuro. “Estamos empezando a comprender mejor las mutaciones genéticas que originan estos tumores, lo que abre la puerta a tratamientos más dirigidos”, comenta. Sin embargo, reconoce que todavía queda un largo camino por recorrer para mejorar tanto la supervivencia como la calidad de vida de los pacientes con sarcoma óseo.

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