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El pasado mes de marzo, Tallulah Willis, la hija menor que el actor tuvo con Demi Moore, subía a su perfil de Instagram un vídeo revelador. Tallulah aparecía en brazos de su padre mientras este estaba siendo entrevistado por los medios. En el vídeo, la pequeña no dejaba de acariciar a Bruce Willis en unos divertidísimos gestos. Bajo este entrañable clip, escribió estas palabras: "Dime que eres autista sin decirme que eres autista". Y es que, como ella misma contó, fue diagnosticada de autismo.
No es la única que ha descubierto en su edad adulta que tiene autismo, un trastorno del neurodesarrollo que puede pasar desapercibido en ocasiones, pero que explica muchos de los comportamientos de estas personas. Tallulah tiene 30 años y el diagnóstico lo recibió con 29. Poder responder a muchas de las preguntas que se habrá hecho sin duda habrá mejorado su bienestar.
Para conocer cómo se pueden detectar esas señales de autismo en la edad adulta y que pueden pasar desapercibidas, hablamos El Dr. Victor Navalón, psiquiatra de los hospitales Vithas Valencia 9 de Octubre y Vithas Aguas Vivas; y del Centro Médico Vithas Alzira. Este experto nos explica cuáles son esos síntomas que pueden hacernos sospechar que una persona está dentro del espectro autista para que pueda recibir un diagnóstico correcto y su calidad de vida así como sus relaciones mejoren.
¿Cuáles son los síntomas que pueden pasar desapercibidos en las personas adultas?
En los adultos, algunas señales pueden ser sutiles y pasar desapercibidas. Como, por ejemplo, la dificultad en la interacción social. Es decir, tener problemas para interpretar normas sociales y el lenguaje corporal, lo que puede llevar a momentos de confusión y malentendidos.
También pueden existir dificultades en la comunicación al tomarse las cosas de manera muy literal sin entender las metáforas o el doble sentido. Otro de los síntomas frecuentes es el de tener intereses restringidos y repetitivos, es decir, tener unos intereses muy específicos y profundos en ciertos temas que suelen exprimir y suele ser tema frecuente de conversación con otras personas, que normalmente suelen no estar interesadas y dificulta la socialización con el otro.
¿Es común que se confunda con otros trastornos? Si es así, ¿cuáles son?
Sí, es bastante común que el autismo en adultos se confunda con otros trastornos debido a la posible superposición de síntomas.
Algunos de los trastornos más frecuentemente confundidos con el autismo en adultos suele ser el trastorno Obsesivo-Compulsivo (TOC), ya que la rigidez conductual y la necesidad de mantener rutinas estrictas en personas con autismo pueden parecerse a las conductas ritualizadas del TOC. Los trastornos de ansiedad, esto es debido a que la ansiedad social y la dificultad para adaptarse a cambios pueden ser características tanto del autismo como de varios trastornos de ansiedad. También con el Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH), ya que la falta de atención y la impulsividad pueden ser frecuentes en ambos trastornos, lo que puede llevar a diagnósticos erróneos.
Es importante que los profesionales de la salud mental realicemos evaluaciones exhaustivas para diferenciar entre estos trastornos y proporcionar el tratamiento adecuado a cada persona.
¿Cómo puede ser la vida de alguien que no sabe que está en el espectro autista?
La vida de una persona que no sabe que está en el espectro autista puede estar llena de retos y confusión. Sin un diagnóstico, es posible que no entiendan por qué ciertas situaciones les resultan difíciles o por qué se sienten diferentes a los demás. Algunas dificultades comunes que podrían enfrentar en su día a día:
- Pueden tener problemas para entender las normas sociales, interpretar el lenguaje corporal o las expresiones faciales, lo que puede llevar a malentendidos y dificultades para hacer y mantener amistades.
- La comunicación verbal y no verbal puede ser un reto. Pueden tener dificultades para mantener una conversación, entender el sarcasmo o las bromas, y expresar sus propias emociones de manera clara.
- Pueden depender de rutinas estrictas para sentirse seguros y tranquilos. Los cambios inesperados en su rutina diaria pueden causar ansiedad y estrés.
- Sin un diagnóstico, pueden sentirse incomprendidos, lo que afectará a su autoestima y llevar a otras dolencias emocionales como la ansiedad o depresión.
- Pueden tener dificultades en la escuela o en el trabajo debido a problemas de concentración, organización y manejo del tiempo. Sin el apoyo adecuado, estos desafíos pueden afectar su rendimiento y oportunidades de crecimiento.
Para evitar que los adultos que están en el espectro autista tengan problemas en su vida diaria, es importante un diagnóstico adecuado, ya que puede ayudar a comprender mejor sus experiencias, acceder a recursos y apoyo, y desarrollar estrategias para manejar sus desafíos diarios.
¿Qué señales pueden indicar que una persona debería buscar un diagnóstico profesional?
Existen varias señales que pueden indicar que una persona debería considerar un diagnóstico profesional. Algunas de las más comunes incluyen:
- Dificultad para mantener contacto visual.
- Problemas para comprender las señales sociales y la comunicación no verbal.
- Falta de interés en interactuar con otros.
- Comportamientos repetitivos o rituales.
- Intereses restringidos y muy intensos.
¿Qué diferencias hay en la presentación de este trastorno entre niños y adultos?
En los niños, los signos suelen incluir dificultades en el desarrollo del lenguaje, falta de interés en el juego social y comportamientos repetitivos. En adultos, suelen ser más frecuentes problemas en las relaciones sociales, dificultades en el empleo y comportamientos rígidos. Además, los adultos pueden haber desarrollado desde la infancia, estrategias de compensación que ocultan sus dificultades, complicando el diagnóstico. Por eso, su detección temprana y el tratamiento adecuado son cruciales para mejorar la calidad de vida de las personas con autismo.
¿Cómo afecta no tener un diagnóstico a las relaciones interpersonales y al entorno laboral de una persona?
Sin un diagnóstico, las dificultades en la comunicación y la interacción social pueden ser malinterpretadas como falta de interés o habilidades sociales deficientes. Esto puede llevar a malentendidos y conflictos en las relaciones personales. En el entorno laboral, la falta de un diagnóstico puede resultar en una falta de adaptaciones necesarias, lo que puede afectar el rendimiento y la satisfacción laboral.
La persona autista que no ha recibido un diagnóstico adecuado, puede experimentar altos niveles de estrés y ansiedad en el entorno laboral debido a la falta de comprensión y apoyo adecuado
¿Qué recursos o apoyos están disponibles para quienes reciben un diagnóstico tardío?
Terapias como la cognitivo-conductual pueden ser útiles para desarrollar habilidades sociales y de comunicación. También grupos de apoyo ofrecen un espacio para compartir experiencias y obtener consejos. Programas de empleo especializados pueden ayudan a encontrar y mantener trabajos adecuados. El asesoramiento psicológico puede ser crucial para manejar el estrés y la ansiedad. Además, existen organizaciones y asociaciones locales que proporcionan información y recursos, además de fomentar una educación continua y talleres, también son valiosos para aprender nuevas habilidades y estrategias de afrontamiento.
