Skip to main contentSkip to footer
mujer con una caja de cigarrillos en la mano tapándose la boca© Adobe Stock

7 consecuencias positivas para tu boca si dejas de fumar

Los expertos apuntan que dejar el tabaco tiene muchos beneficios también para tu salud bucodental


11 de julio de 2024 - 14:29 CEST

Nuestra salud bucal es una de las más damnificadas por el consumo de tabaco. No podemos perder de vista que consumir cigarrillos tiene numerosos efectos adversos sobre los dientes y la boca. Un motivo más para plantearse abandonar este hábito.  Por todo ello, los expertos de la clínica odontológica Sermade, nos explican los 7 principales cambios y beneficios que experimenta la boca cuando una persona deja de fumar.

Lee también:  Salud mental y salud bucodental: ¿cuál es la relación?

 1. Mejora en la producción de saliva

Uno de los efectos del consumo de tabaco es que se reduce la producción de saliva, lo que provoca sequedad bucal (xerostomía). Y no podemos perder de vista que la saliva es clave para mantener una boca sana, pues cumple una importante función: ayuda a neutralizar los ácidos producidos por las bacterias en la placa dental, lava las partículas de comida y proporciona enzimas que inician la digestión. Los expertos constatan que tras dejar de fumar, la producción de saliva comienza a normalizarse, mejorando la lubricación de la boca y reduciendo la sensación de sequedad. Y otra buena noticia: esta mejora se puede notar en unas pocas semanas después de dejar de fumar.

2. Reducción del mal aliento (halitosis)

Sabemos que el mal aliento o halitosis es un problema común entre los fumadores debido a los residuos del tabaco y la sequedad bucal. Por eso, cuando una persona deja de fumar, la reducción de las sustancias químicas tóxicas en la boca y el aumento de la producción de saliva ayudan a disminuir el mal aliento. Y es un efecto bastante inmediato, pues muchas personas notan una mejora en su aliento en las primeras semanas tras dejar de fumar.

3. Reducción de la placa y el sarro

Otro de los efectos colaterales es el sarro. Los fumadores tienden a acumular más placa y sarro en sus dientes por la presencia de partículas de tabaco y una menor producción de saliva. Dejar de fumar permite que las rutinas de higiene bucal sean más efectivas, lo que reduce la acumulación de placa. Los expertos de la clínica nos explican que con limpiezas dentales regulares y una buena rutina de cepillado y uso de hilo dental, la cantidad de sarro disminuye significativamente.

4. Mejoras estéticas

Una de las consecuencias apreciables a simple vista del tabaco es el hecho de que mancha los dientes, dándoles una apariencia amarillenta o marrón, debido a los componentes de los cigarrillos, sobre todo la nicotina y el alquitrán. Al dejar de fumar, la acumulación de estas sustancias se detiene permitiendo que las limpiezas dentales y los tratamientos blanqueadores sean más efectivos. Aunque las manchas severas pueden requerir tratamientos profesionales, muchos exfumadores notan una mejora en la apariencia de sus dientes con el tiempo.

5. Reducción del riesgo de cáncer oral

Es una de las consecuencias más graves del consumo de tabaco. Y es que no podemos olvidar que es una de las principales causas de cáncer oral, que puede afectar los labios, la lengua, las mejillas y la garganta. Pues bien, se ha comprobado que el riesgo de desarrollar cáncer oral disminuye con el tiempo cuando se deja de fumar. Aunque los beneficios no son inmediatos, el riesgo sigue disminuyendo cuanto más tiempo una persona permanece libre de tabaco. Se estima que después de 10 años sin fumar, el peligro del cáncer oral se reduce aproximadamente a la mitad en comparación con los fumadores actuales.

6. Mejoras en la percepción del sabor y el olfato

Los fumadores ven cómo su sentido del gusto puede alterarse. Y es que fumar afecta negativamente las papilas gustativas y la capacidad de percibir olores, lo que puede reducir el disfrute de los alimentos y bebidas. Por eso, cuando se deja de fumar, las papilas gustativas y el sentido del olfato comienzan a recuperarse. Muchas personas notan una mejora en su capacidad para saborear y oler en unas pocas semanas, lo que puede hacer que las comidas sean más placenteras y que la boca se sienta más fresca.

7. Fortalecimiento del sistema inmune bucal

Por último, los expertos nos aclaran que fumar debilita el sistema inmune y aumenta la susceptibilidad a infecciones bucales, como la candidiasis oral. Dejar de fumar fortalece el sistema inmunológico, lo que ayuda al cuerpo a combatir las infecciones más eficazmente y a mantener una boca más saludable.

mujer con el pelo rizado sonriente mirando a cámara© Adobe Stock

 Consejos buenos para la salud de tu boca

Teniendo todo esto en cuenta, para maximizar los beneficios de dejar de fumar y acelerar la recuperación de la salud bucal, Sermade recomienda seguir estas prácticas:

  • Cuidar nuestra higiene bucal. Es fundamental cepillarse los dientes al menos dos veces al día con pasta dental con flúor, usar hilo dental diariamente y enjuagar la boca con un enjuague bucal antibacteriano.
  • Revisiones en el dentista regularmente. Las revisiones periódicas en el dentista son fundamentales, para realizarnos limpiezas profesionales y chequeos, especialmente para evaluar y tratar cualquier problema periodontal.
  • La importancia de llevar una dieta saludable. Consumir una dieta equilibrada rica en frutas y verduras, que ayuda a mantener la salud bucal y a fortalecer el sistema inmunológico.
  • Hidratación adecuada. No podemos olvidar la importancia de beber suficiente agua para mantener la boca hidratada y estimular, de esta forma, la producción de saliva.
  • Evitar sustitutos de tabaco. No conviene utilizar cigarrillos electrónicos, tabaco de mascar o vapeadores, ya que también pueden tener efectos adversos en la salud bucal.
  • Uso de productos de cuidado bucal especializados. Además, recomiendan que nos planteemos el uso de productos diseñados para exfumadores, como enjuagues bucales que promuevan la salud de las encías y pastas dentales para blanqueamiento.