¿Has escuchado hablar de plantas medicinales como la bolsa de pastor (Capsella bursa-pastoris) para las reglas abundantes? ¿O de remedios caseros para reducir el sangrado menstrual como aplicar compresas frías en el vientre, tomar vinagre de manzana e infusiones de canela, regaliz, semillas de cilantro o frambuesa? Es probable que sí y que incluso tú hayas recurrido a la fitoterapia para controlar este trastorno de la menstruación. Sin embargo, ¿qué dicen los expertos sobre utilizar estos recursos de la naturaleza? ¿Es conveniente?
"Las menstruaciones con un sangrado de hasta, aproximadamente, 80 ml se consideran fisiológicas. Si es un poco más (es difícil tener una noción real de la cantidad de sangrado), pero no hay otros signos o síntomas que hagan sospechar de una problemática mayor, se consideraría también normal si se puede ir reponiendo el hierro que se pierde. La única precaución es que, ciclo tras ciclo, se pueden ir vaciando más rápidamente los depósitos de hierro (ferritina) y este factor contribuye a la aparición de anemia ferropénica", nos explica la farmacéutica Mar Santamaria, de PromoFarma.
En caso el de encontrarnos ante pérdidas muy abundantes, nos explica la especialista, "no recomendaría un suplemento de fitoterapia con este propósito porque no tienen una indicación en este sentido", alerta la boticaria que, nos comenta algunas plantas que sí pueden ayudar en los trastornos menstruales: "Plantas como el Vitex agnus-castus o sauzgatillo, por ejemplo, sí pueden ayudar en casos leves de desajustes menstruales o síndrome premenstrual. Pero, como todos los extractos vegetales, puede haber contraindicaciones e interacción con medicamentos. Además, ante signos difíciles de manejar con relación a los problemas menstruales, siempre se requiere una evaluación ginecológica para descartar otros problemas de base. Y, si es necesario, la instauración de un tratamiento farmacológico", indica.
¿Qué es el sangrado menstrual abundante?
Según explica la directora de las Clínicas EVA, la doctora Isabel Vielsa, se puede concluir que el sangrado es abundante cuando es necesario llevar doble protección o cuando se cambia el tampón, la compresa o la copa menstrual cada cuatro horas o menos. También cuando la duración de la regla se extiende más allá de los siete días.
El sangrado menstrual abundante (SMA) o menorragia afecta a un 27,2% de las mujeres europeas según el artículo “Actualización sobre el sangrado menstrual abundante” publicado en la revista oficial Progresos de Obstetricia y Ginecología de la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO). Sin embargo, es un problema poco consultado, a pesar de las molestias que produce. Así lo indica el Dr. Jorge Fernández Parra, jefe de servicio de Obstetricia y Ginecología del Hospital Universitario Virgen de las Nieves y uno de los autores del artículo: “Hay que decir a las mujeres que consulten cuando sus reglas afecten a su calidad de vida, porque hay muchas opciones para mejorarla”.
Según este experto, es fundamental acudir al ginecólogo para hablarlo, puesto que hay soluciones para atajarlo. En este sentido, el Dr. Fernández Parra incide en que “es llamativo observar cómo, tras recibir tratamiento, estas pacientes comentan que les ha cambiado la vida; por eso es imprescindible iniciar un diagnóstico y establecer el tratamiento adecuado para cada caso”. Además, este problema tiene un gran impacto en las mujeres, influyendo en su día a día. Puede venir acompañado de fuertes dolores o anemia, interferir en situaciones cotidianas, como la práctica de ejercicio físico o disminuyendo el rendimiento académico y laboral. Asimismo, este impacto también se manifiesta de manera más evidente en algunas actividades propias de la época estival, tales como ir a la playa, la piscina o evitar vestir ropa de color claro por el temor a manchar las prendas.
Este problema puede ser una 'pecularidad' de la mujer, pero en otras ocasiones puede obedecer a algunas enfermedades. Por ejemplo, la endometriosis o la adenomiosis. Ambas provocan el crecimiento anormal de tejido endometrial. Otra de las causas de sangrado abundante son los miomas uterinos, al igual que los pólipos uterinos, aunque estos se originan en el tejido endometrial. El cáncer ginecológico puede provocarlo, especialmente antes de la menopausia, y se suele acompañar de dolor pélvico e hinchazón. Además, el sangrado menstrual abundante puede ocurrir al inicio y al final del ciclo reproductivo.
Tratamiento de esta dolencia
En primer lugar, será necesario que el médico conozca cuál es la causa principal que está provocando el sangrado. Es decir, si existe una patología que responda a este trastorno. Si no es así, existen tratamientos que se toleran muy bien para reducir el sangrado. Como explica la Dra. Isabel Vielsa, "el tratamiento hormonal es una herramienta clave". Por ejemplo, se administra, por un lado, estrógeno y progesterona, y, por otro, estrógeno y gestágeno. Una de las diferencias entre ambos abordajes es que el gestágeno es un método anticonceptivo.
Otro tipo de medicación es la que se basa en antifibrinolíticos, que mejoran la coagulación de la sangre, disminuyendo su flujo durante los días del periodo.
Isabel Vielsa recuerda, por último, en la necesidad de acudir a revisión ginecológica ante cualquier duda de sangrado anormal. Una buena medida para detectarlo es pensar si la regla nos limita en nuestras actividades diarias.
