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Cada relación de pareja tiene sus propias dinámicas y su forma de mantener y fortalecer el vínculo. También de afrontar las crisis o buscar vías para anticiparse a ellas. En este sentido, Nuria Roca reveló el pasado 14 de enero en La Roca (LaSexta) que ella y su marido practican el marital summer sabbatical o lo que es lo mismo, un descanso en vacaciones de unos días de la pareja y de los hijos para echarse de menos y evitar las crisis. Se trata de una tendencia que ayuda a mantener la buena salud familiar. Pero, también, en ocasiones, es una técnica que se aplica en terapia de pareja.
Hablamos con varios psicólogos que nos explican los beneficios de tomarse este descanso temporal, así como en qué consiste la separación terapéutica, cuáles son las premisas para que de verdad funcione y qué aspectos hay que tener en cuenta para que esta separación temporal no se convierta en un problema más.
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¿Qué es el 'marital summer sabbatical' o el 'descanso de la pareja`?
En opinión de Ángel Luis Gillén, psicólogo, sexólogo y director de Psicopartner, "tomarse un descanso en una relación siempre es bueno porque tomar distancia aporta perspectiva, puede ayudar a ambas partes a redescubrir su independencia y fortalecer su autoestima. También te permite analizar mejor lo que gusta y lo que no en la relación". Por tanto, puede ser beneficioso en ciertas circunstancias, pero también presenta riesgos y desafíos. En circunstancias de crisis o distanciamiento se valora más al otro, pero también se pueden cruzar terceras personas que terminen con el vínculo.
Por otro lado, en terapia de pareja, existe una alternativa conocida como "separación terapéutica", nos cuenta Pilar Conde, psicóloga y directora técnica de Clínicas Origen. En esta, la pareja opta por vivir separada, pero se planifican encuentros, citas y sesiones individuales y de pareja con un psicólogo, convirtiendo así la separación en un proceso acompañado por un profesional", nos explica. Por lo general, nos aclara la experta, esta técnica se considera después de haber realizado sesiones previas de terapia de pareja y cuando se observa que no se logran avances debido a diversas razones. También puede surgir cuando la pareja contempla distintas modalidades de separación y ambos están de acuerdo en explorar esta opción como paso previo.
No obstante, Pilar Conde destaca que la elección de tomarse un tiempo de descanso -por ejemplo, un año- no cuenta con respaldo como técnica psicológica probada en términos de su efectividad. "Si la pareja decide emprender este camino, deben ser conscientes de los riesgos y oportunidades inherentes, y ambas partes han de estar de acuerdo con dicha decisión", señala.
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¿Cuándo hay que tomarse un descanso en pareja?
Dejando de lado estos descansos de días, que a todos nos gusta tomarnos de vez en cuando, como el que ha contado Nuria Roca, ¿cuándo hay que practicar esta terapia de pareja denominada separación terapéutica? En cuanto a las circunstancias apropiadas para optar por esta opción, la psicóloga Pilar Conde sugiere considerarla cuando "la pareja no muestra motivación para el cambio, está pensando en la separación, pero aún tiene dudas, y ambos están de acuerdo en probarlo, preferiblemente con el respaldo de un profesional".
Por su parte, el director de Psicopartner sostiene que se puede tomar esta alternativa "en las que al menos uno de los dos miembros de la pareja no está bien o no lo está disfrutando, sino que, por el contrario, la relación le produce malestar o dolor. Otra circunstancia es cuando uno o ambos sienten que necesitan crecer o evolucionar individualmente".
¿Cómo tomarse un descanso en pareja para que sea beneficioso?
Con respecto a cómo manejar este descanso, Conde aconseja que cada pareja establezca claramente las pautas de contacto, ya sea telefónico, a través de WhatsApp, en quedadas cortas o largas. En el caso de seguir un formato de "separación terapéutica", se deben definir los contactos semanales, las quedadas y las sesiones con el profesional.
"Exactamente igual que cualquier pareja, ellos, ambos, ponen las normas y han de cumplirlas", añade Ángel Luis Gillén. Eso sí recuerda, "la pausa no debe ser ocasión para que uno de los dos despliegue su artillería de dependencia o control".
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¿Puede haber 'infidelidad' en este tipo de descansos?
En cuanto a la fidelidad durante en esta pausa terapéutica, Pilar Conde sugiere que si la pareja está de acuerdo, deben decidir cómo abordar el tema, estableciendo reglas sobre mantener relaciones con otras personas, informar o no a la otra persona, y hasta dónde puede llegar esa relación. Cada pareja debe decidir el formato y asumir los riesgos de esas decisiones.
Por su parte, Ángel Luis Guillén recuerda que son los miembros de la pareja los que deben acordar cómo comportarse en este aspecto durante el descanso, y cómo deben comportarse en ese aspecto durante el descanso. "La comunicación abierta sobre las expectativas y las experiencias durante el descanso es clave", concluye.
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