Si has tenido la ocasión de darte un paseo por alguna calle comercial en estos días, no habrás podido permanecer ajeno a los carteles de promoción y a las aglomeraciones en torno a determinadas tiendas. Estamos, un año más, en la semana del Black Friday, esos días en los que se multiplican las ofertas y son muchas las personas que aprovechan para adelantar sus compras navideñas. Y no solo de forma presencial en los comercios, sino que se han disparado las cifras de comercio on line coincidiendo con estos días. Muchas personas recurren a su móvil o a su portátil y se ponen manos a la obra, tarjeta de crédito mediante, muchos de ellos ya por la noche, al acabar su jornada laboral. ¿Te has planteado si es una buena idea comprar por la noche? No lo es, si tenemos en cuenta los datos que aporta la Sociedad Española de Neurología, que alerta de que comprar faltos de sueño o a última hora del día nos puede convertir en ‘malos consumidores’
“El sueño es fundamental para un funcionamiento óptimo físico y mental, pero también lo puede ser para nuestro bolsillo, más aún en estas fechas próximas al Black Friday o al Cyber Monday. Y es que, en el control de impulsos está implicada un área cerebral denominada corteza prefrontal y esta área es muy vulnerable a la falta de sueño o al sueño de poca calidad”, explica la Dra. Ana Fernández Arcos, Coordinadora del Grupo de Estudio de Trastornos de la Vigilia y el Sueño de la Sociedad Española de Neurología (SEN).
Lee también: ¿Podrías ser adicta a las compras?
Dormir bien, fundamental para tomar mejores decisiones
Así, desde la Sociedad Española de Neurología (SEN) recuerdan que una duración de sueño adecuada es aquella tras la que nos encontramos en condiciones óptimas para llevar a cabo las actividades diarias. Es cierto que la cantidad de horas de sueño es variable entre personas, e incluso puede cambiar a lo largo de nuestra vida, pero hay un hecho claro: cuando el sueño es menor al recomendado (aproximadamente menos de 7 horas en adultos sanos) o de baja calidad (por despertares frecuentes o trastornos de sueño) se alteran funciones cerebrales de gran importancia, entre las que se pueden destacar la atención, la memoria, la regulación emocional y la percepción sensorial. Sea de forma puntual o crónica, la falta de sueño afecta a la corteza prefrontal, disminuyendo su actividad con afectación de la atención, control de impulsos, regulación del ánimo y toma de decisiones.
“Tras una noche sin dormir pueden verse alteradas la dieta, la toma de medicación, el rendimiento laboral o incluso la conducción. Si una persona tiene falta de sueño, por ejemplo, por tener un trabajo nocturno, tendrá más dificultades para mantener el autocontrol y por ello dominar peor sus impulsos, debido a la alteración en el funcionamiento de la corteza prefrontal ya mencionada. Por esta misma razón, algunas de las personas que presentan rasgos de personalidad más impulsivos, con problemas de autocontrol, podrían achacarlo a una privación crónica de sueño”, comenta la Dra. Celia García Malo , Vocal del del Grupo de Estudio de Trastornos de la Vigilia y el Sueño de la Sociedad Española de Neurología (SEN).
Lee también: ¿Te cuesta tomar decisiones? Estas herramientas te lo pondrán más fácil
¿Comprar o no por la noche?
Sea como fuere, lo cierto es que estos días son muchas las personas que acaban haciendo compras on line nocturnas: desde vuelos a aparatos tecnológicos o ropa. Los expertos insisten en que no es la mejor idea. Y es que no podemos olvidar que cuando nuestra mente está cansada, nuestra fuerza de voluntad está mermada y nuestro cerebro no reflexiona todo lo que debería sobre las implicaciones del coste, y es más probable que gastemos más dinero.
“Desde la implantación de las tiendas online, comprar por la noche es ya un hábito habitual, porque quizás sea el momento del día en que el que tengamos más tiempo para realizar ciertas tareas que en otro horario sean más complicadas. Sin embargo, es posible que nuestras decisiones no sean tan acertadas como las que hacemos durante el día, ya que el cansancio y la somnolencia también nos hacen más proclives a hacer una compra que de otra manera sería mejor seleccionada, más económica o que postpondríamos a un momento más adecuado. Por esta razón, es mayor el riesgo de comprar cosas innecesarias o que no son adecuadas a nuestro bolsillo si la compra se realiza por la noche”, señala la Dra. Ana Fernández Arcos.
“La experiencia de comprar al atardecer o durante la noche tiene también otras repercusiones. En este momento del día deberíamos estar relajados y desconectar de la actividad del día. Navegar por Internet y comprar produce un estado de hiperalerta y un pico de secreción de dopamina que nos dificultará conciliar el sueño más adelante, generando un círculo vicioso que nos lleva a un sueño corto y una peor forma física y mental”, apunta la doctora García Malo.
“Así pues, durante estas fechas en las que se dispara el consumo, los estímulos y somos bombardeados con ofertas que parecen irrechazables, nos gustaría recordar que las compras impulsivas, además de que pueden ser no recomendables para nuestro bolsillo, tampoco lo son para nuestra salud”, concluye la doctora Fernández Arcos. “Cualquier compra que hagamos es recomendable hacerla teniendo consciencia del gasto y de si lo que estamos comprando es verdaderamente necesario. Por lo tanto, recomendamos evitar comprar cuando estamos privados de sueño porque nuestro cerebro se vuelve ‘más impulsivo’ y ‘menos consecuente’ y recordar que las compras durante la noche también afectan a nuestro sueño y descanso normal”.