Fentanilo. Una palabra desconocida por la mayoría de la población hasta hace unos meses, cuando, de repente, este opioide sintético copaba las informaciones y saltaba la alarma por su uso indebido en determinados colectivos de la población Estadounidense. Desarrollada en la década de los 60, este potente analgésico usado de forma hospitalaria pasaba a ser consumido como una droga, lo cual ha generado una auténtica crisis de salud pública en el país americano, causando una auténtica avalancha de sobredosis en algunas zonas de ciudades como Filadelfia. Las imágenes de personas afectadas por un consumo indebido de este fármaco han dado la vuelta al mundo.
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Qué es el fentanilo
Con esta situación de fondo, quien más quien menos ha escuchado hablar sobre el fentanilo en los últimos meses, pero, ¿qué es exactamente? “El fentanilo es un potente analgésico opioide de síntesis que pertenece a la misma clase de medicamentos que la morfina. Es un agonista de los receptores opioides en el cerebro y el sistema nervioso central. Su potencia es significativamente mayor que la de otros opioides, lo que lo hace útil en situaciones de dolor intenso. En términos químicos, el fentanilo es un derivado sintético del opio”, nos explica con detalle el Dr. Jorge Huerta, Jefe de Medicina Interna y Urgencias de Mi Tres Torres, miembro de Top Doctors, que aclara que se ha vuelto relevante en los últimos meses debido a su uso recreativo y sus efectos potencialmente letales.
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¿Cuáles son sus principales usos en medicina?
Estamos ante un medicamento que, tal y como nos indica el doctor, se utiliza en medicina principalmente para el tratamiento del dolor severo, especialmente en situaciones en las que otros analgésicos no proporcionan alivio suficiente. “Estos usos médicos incluyen el dolor postoperatorio, el dolor asociado al cáncer y otras condiciones de dolor crónico. En España, se utiliza en hospitales bajo estricta supervisión médica”, detalla el experto, que aclara que el fentanilo siempre está sujeto a prescripción médica debido a su potencial para el abuso, los efectos secundarios graves y su capacidad para generar dependencia física y psicológica.
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Una sustancia que puede generar adicción
Estamos, por lo tanto, ante una sustancia que puede llegar a generar adicción. “El fentanilo es una sustancia altamente adictiva, al igual que otros opioides. El abuso o el uso prolongado pueden llevar a la tolerancia, la dependencia y la adicción. La necesidad de aumentar la dosis para obtener el mismo efecto es un signo de tolerancia, lo que puede ser peligroso”, aclara el doctor Huerta sobre este compuesto que es bastante más potente que la morfina. “El fentanilo es notablemente más potente que la morfina. Se estima que es entre 50 y 100 veces más potente que la morfina. Esto significa que se requiere una cantidad significativamente menor para lograr el mismo nivel de alivio del dolor, pero también conlleva un mayor riesgo de sobredosis y adicción o dependencia si se administra incorrectamente”, nos cuenta.
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Hacer un uso correcto
La clave está, por lo tanto, en hacer un uso adecuado y correcto de este potente analgésico, pues un uso incorrecto puede tener consecuencias negativas. Es más, el doctor aclara que el uso indebido del fentanilo puede tener consecuencias devastadoras. “Puede provocar efectos secundarios graves, como la depresión respiratoria, que es una disminución peligrosa de la función respiratoria. La sobredosis de fentanilo puede llevar a la pérdida del conocimiento, el coma e incluso la muerte. El abuso crónico puede dañar la salud física y mental a largo plazo, así como problemas en el entorno familiar y laboral”, nos detalla.
Los expertos, eso sí, coinciden en que bien utilizado es un medicamento muy seguro. “El fentanilo puede ser considerado seguro cuando se utiliza bajo supervisión médica y se siguen las indicaciones precisas. En situaciones clínicas apropiadas, su beneficio para el alivio del dolor supera los riesgos. Sin embargo, es importante destacar que su seguridad se ve comprometida cuando se utiliza de manera inapropiada, especialmente de forma recreativa o no médica”, comenta el doctor Jorge Huerta.
¿Cuáles son las señales de una sobredosis?
Le preguntamos al experto cuáles son las señales que nos pueden alertar de que se ha producido una sobredosis de fentanilo y cita las siguientes:
- Dificultad para respirar.
- Confusión extrema.
- Debilidad.
- Pupilas puntiformes (contraídas).
- Piel fría y húmeda.
- Náuseas, vómitos y pérdida de la conciencia.
“Ante la sospecha de una sobredosis, es crucial buscar atención médica de inmediato”, alerta.
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Alarma en Estados Unidos
Le preguntamos, por último al especialista sobre el mensaje que transmitiría ante la alarma que se ha ido extendiendo debido a la situación en algunas ciudades de Estados Unidos. “Frente a la creciente alarma en algunas ciudades de Estados Unidos debido al uso indebido del fentanilo, es esencial transmitir un mensaje de conciencia y prevención. La educación sobre los riesgos del fentanilo, la importancia de la prescripción médica y la disponibilidad de tratamientos para personas con problemas de adicción son fundamentales. La colaboración entre profesionales de la salud, autoridades y comunidades es crucial para abordar esta crisis de salud pública y reducir los riesgos asociados con el fentanilo. La prevención y el acceso a tratamientos son claves para abordar esta problemática”, concluye.