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Debido, entre otros factores, a que el hombro es la articulación más móvil del cuerpo, con frecuencia se ve afectado por lesiones, siendo una de las más frecuentes la lesión del manguito rotador. Lo primero de todo es, claro está, situar qué es el manguito rotador. Hablamos de un grupo de músculos y tendones, que mantiene la articulación del hombro en su lugar y ayuda en el movimiento y la fuerza del brazo. Se trata de una estructura que se encuentra en el hombro y está formada por un grupo cuatro músculos y sus respectivos tendones (supraespinoso, infraespinoso, subescapular y redondo menor). Hay que tener en cuenta que es una estructura esencial en el correcto funcionamiento del hombro, ya que ayuda a estabilizar la articulación del hombro dotándola de fuerza y movilidad.
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¿A quién afecta?
Según la Sociedad Española de Cirugía Ortopédica y Traumatología, la incidencia de este tipo de lesiones aumenta con la edad, con una afectación en el 25% de los pacientes mayores de 60 años y en el 50% de los mayores de 80 años. No es una cuestión menor, pues hay que tener muy presente que las lesiones del manguito pueden causar problemas que afectan a la calidad de vida de quien lo padece: debilidad y dolor, reducir la amplitud de movimiento, e incluso producir un deterioro evolutivo irreversible de la articulación del hombro. Hay personas con más riesgo de desarrollar este problema, como aquellas con trabajos que requieren movimientos de brazos repetitivos sobre la cabeza, como la carpintería o la pintura de casas, o practican determinados deportes entre los que se encuentran el béisbol, el tenis o el levantamiento de pesas. Además, también puede haber un componente genético en las lesiones del manguito rotador, ya que estas lesiones suelen aparecer más frecuentemente en determinadas familias, tal y como confirman desde Mayo Clinic.
“El manguito rotador es un elemento clave en el correcto funcionamiento del hombro y proporciona la mayor parte de la estabilidad dinámica, permitiendo un movimiento preciso y coordinado. De los cuatro que lo forman, el tendón que más comúnmente se lesiona es el supraespinoso, pudiéndose lesionar varios tendones a la vez”, detalla el doctor Juan Aguilar, cirujano ortopédico y traumatólogo especialista en patología de hombro y codo en el Hospital Vithas Valencia 9 de Octubre.
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Un problema que puede ser doloroso
Según explican los expertos de Mayo Clinic, aunque hay algunos casos en los que las lesiones no causan dolor, lo cierto es que es una de las señales más significativas de este problema de salud, y el dolor asociado a la lesión del manguito rotador puede describirse como un dolor sordo y profundo en el hombro, que llega incluso a perturbar el sueño en algunos casos. Además, puede dificultar la acción de peinarse o tocarse la espalda y estar acompañado de debilidad en el brazo.
La importancia del diagnóstico precoz
“Es de vital importancia diagnosticar y tratar a tiempo esta patología, ya que existe un amplio espectro de patrones de lesión, y las consecuencias de no aplicar el tratamiento adecuado pueden ser irreversibles”, nos cuenta el especialista.
Y es que la patología del manguito rotador no solamente es relevante por su alta prevalencia, siendo la tercera más frecuente del sistema musculoesquelético con un 16%, por detrás de la patología lumbar y de la rodilla, sino por la alta incapacidad funcional que supone a los pacientes con una limitación en sus actividades diarias, laborales y deportivas.
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Cuáles son las causas que provocan la lesión
Uno de los objetivos es identificar cuáles son las causas que pueden estar detrás de esta lesión. Así, desde Vithas apuntan que pueden deberse a hipovascularidad y alteraciones metabólicas relacionadas con el envejecimiento, factores genéticos y también por traumatismos de repetición, sobreusos, pinzamientos, lesiones agudas… Lo cierto es que existen diferentes grados de complejidad, desde procesos inflamatorios y degenerativos (tendinosis) hasta roturas parciales, completas (pequeñas y grandes) y masivas, existiendo en cada caso una alternativa ideal de tratamiento.
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Cuál debe ser el tratamiento
Todo depende, claro está, de la gravedad de la lesión en la que nos encontremos y de cómo condicione la vida de quien la padece. Lo cierto es que en un primer momento el enfoque inicial del tratamiento suele ser conservador, pero puede ser que no sea suficiente. Por eso, cuando la evolución no es favorable, puede ser necesario recurrir a la intervención quirúrgica, para lo cual siempre es recomendable acudir a un cirujano especialista en cirugía de hombro. “Se recomienda cirugía en los pacientes que tienen una rotura confirmada del manguito rotador mediante pruebas de imagen y que, además, tienen dolor y limitación funcional a pesar de haber intentado un tratamiento conservador. Sim embargo, no todas las lesiones ni los pacientes son iguales y la modalidad de tratamiento, ya sea dentro de las opciones quirúrgicas o conservadoras, puede variar en cada caso”, cuenta el doctor Aguilar.
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Tipos de cirugía de hombro
En el caso de que la cirugía sea necesaria, hay que tener en cuenta que existen diferentes tipos de intervenciones de hombro, aunque en el tratamiento de la patología del manguito rotador, la cirugía suele ser artroscópica. En un primer momento, el médico revisa el interior del hombro con una pequeña cámara conectada a un monitor, llamada artroscopio, que se inserta a través de un pequeño orificio, para poder confirmar el diagnóstico pre-quirúrgico y seguir adelante con la intervención. Mediante el artroscopio, el cirujano puede observar en detalle toda la articulación y constatar el estado del cartílago, los tendones y los ligamentos del hombro del paciente. “La artroscopia de hombro es una herramienta más que una técnica, que nos permite tratar de forma poco invasiva una amplia variedad de patologías de hombro. En el caso de las roturas del manguito rotador, somos capaces de fijar el tendón nuevamente al hueso por medio de suturas transóseas que no necesitan ser retiradas, pues se reabsorben”, subraya el doctor Aguilar.