Skip to main contentSkip to footer
gettyimages 1159600048jpg© Getty Images

¿Eres brillante en unas materias y muy mala en otras áreas? Quizá seas doblemente excepcional

Las personas que tienen este rasgo en su capacidad de aprendizaje pueden ser brillantes en algunos aspectos, pero presentar muchos problemas en otros. Te explicamos qué es y cómo se maneja


Actualizado 19 de octubre de 2023 - 12:54 CEST

La doble excepcionalidad es un término que quizás no sea tan conocido como debería, pero encierra una realidad compleja para las personas que tienen este rasgo en su capacidad de aprendizaje. Y es que pueden ser muy brillantes en algunos aspectos de su vida, en ciertas materias o aprendizajes. Sin embargo, carecer de habilidades en otras. Mariló Pérez García, psicóloga de Grupo Laberinto, nos explica qué es, por qué aparece y cómo se puede manejar esta situación que es común en muchos niños, pero que también se contempla en adultos.

Como menciona la especialista en psicología, "las personas doblemente excepcionales serían aquellas que demuestran un alto rendimiento en uno o más dominios, como por ejemplo las matemáticas, la ciencia, la tecnología, el arte, capacidades visoespaciales, y que a la vez presentan algún tipo de dificultad o discapacidad, normalmente en áreas relacionadas con el aprendizaje".

- Leer también: Las similitudes entre las altas capacidades y el autismo

Problemas que experimentan las personas con doble excepcionalidad

Cuando se trata de niños, puede ser bastante difícil diagnosticar la doble excepcionalidad y esto se debe en parte a que su alta capacidad puede enmascarar las dificultades que tienen, y viceversa. Por ejemplo, "un niño brillante podría no mostrar signos de hiperactividad o rasgos autistas, lo que dificulta la identificación de su doble excepcionalidad", indica la experta. Esto subraya la necesidad de una comprensión más profunda y cuidadosa de las necesidades de estos individuos.

Por otro lado, aunque se trata de una realidad para muchas personas, aún existe controversia en cuanto a su existencia y cómo abordarla. Algunos expertos cuestionan la falta de estudios científicos que respalden este concepto, mientras que otros creen en él y han observado personas que demuestran tanto altas capacidades como dificultades específicas. Mariló Pérez García indica que "es un espectro muy amplio, como una gama de colores muy diversa". Esto significa que las personas con doble excepcionalidad pueden presentar una amplia variedad de combinaciones de capacidades y dificultades. Esto puede explicar, en parte, la dificultad para el diagnóstico.

- Leer también: Así son las personas adultas con altas capacidades

Cómo se aborda la doble excepcionalidad

Uno de los aspectos más críticos de abordar esta condición, por ejemplo, en niños es la necesidad de una educación personalizada que tenga en cuenta tanto sus puntos fuertes como sus desafíos. La psicóloga destaca la importancia de "educar a los pequeños según sus particularidades, atendiendo a sus puntos fuertes y también a aquellas cuestiones que más les cuestan". Esto puede ayudar a desbloquear el potencial de estas personas, permitiendo que sus capacidades brillen mientras se abordan las dificultades que enfrentan.

En cambio, en adultos es un tema aún más complejo de abordar. Como señala Mariló Pérez García, "resulta todavía un poquito más complicado, porque además, nos vamos adaptando y al final las personas acabamos corrigiendo también las limitaciones que podamos tener, buscando otras estrategias de compensación". Esto significa que los adultos que son doblemente excepcionales pueden haber desarrollado mecanismos de afrontamiento a lo largo de los años que ocultan sus dificultades, lo que hace que sea aún más difícil dentificar y abordar esta realidad.

Así, la intervención en adultos doblemente excepcionales se centra en potenciar sus capacidades y compensar sus deficiencias. Según nos cuenta la especialista en psicología "dependiendo de la dificultad que el adulto presente, se trabajarían unos aspectos u otros". Esto significa que la terapia y el apoyo deben adaptarse a las necesidades individuales de cada persona. Por ejemplo, si un adulto presenta dificultades en habilidades sociales, se trabajaría en el desarrollo de esas habilidades. Si el desafío está en el control de impulsos o en la solución de problemas, se abordaría de manera específica.

En cualquier caso, la psicóloga de Grupo Laberinto insiste en que la doble excepcionalidad merece una mayor atención y comprensión. Es importante que la sociedad en general y los profesionales de la salud mental estén informados sobre este tema para que puedan identificar y apoyar de manera efectiva a las personas doblemente excepcionales, ya sean niños o adultos. Mariló Pérez García destaca que "dar a los niños una educación dirigida a atender a su particularidad, específicamente si tienen esa doble excepcionalidad, intentando ayudarles a compensar esas dificultades a la vez que se contribuye a fortalecer las capacidades que tienen es esencial". Esta misma filosofía debería aplicarse a los adultos, permitiéndoles alcanzar su máximo potencial.

- Leer también: ¿Desde cuándo se pueden detectar las altas capacidades?

Consejos para vivir mejor

Estos consejos pueden ayudar a una persona que vive con esta condición a llevar mejor su doble excepcionalidad:

  1. Busca apoyo profesional: la orientación de un psicólogo o terapeuta especializado en la Doble Excepcionalidad puede ser fundamental para comprender y abordar los desafíos específicos.
  2. Identifica tus puntos fuertes: reconocer y nutrir tus talentos es esencial. Trabaja en el desarrollo de tus habilidades excepcionales para destacarte en tus áreas de fortaleza.
  3. Enfréntate a lo que te cuesta: no te sientas avergonzado por tus dificultades. Enfrentarlas y buscar estrategias de superación es un paso valiente hacia el crecimiento personal.
  4. Comunica tus necesidades: si eres un adulto doblemente excepcional, comunica tus necesidades a tus seres queridos, amigos y colegas. La comprensión y el apoyo de quienes te rodean pueden marcar la diferencia.
  5. Fomenta la autoaceptación: aprende a aceptarte a ti mismo tal como eres, con tus talentos y tus desafíos. La autoaceptación es un paso importante hacia la salud emocional y el bienestar.
  6. Apoya a los niños doblemente excepcionales: si eres un padre, busca el apoyo adecuado para tu hijo y trabaja en estrecha colaboración con profesionales de la educación y la salud mental para brindarles la mejor atención posible.

© ¡HOLA! Prohibida la reproducción total o parcial de este reportaje y sus fotografías, aun citando su procedencia.