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Estamos ante un problema de salud que puede llegar a ser de gravedad si no se diagnostica a tiempo, y que puede afectar especialmente a aquellas personas que sufren algún factor de riesgo cardiovascular desde hace tiempo (10 años por lo menos) sobre todo si son varones. Sobre el aneurisma aórtico abdominal hemos hablado con el doctor Xavi Admetller Castiglione, de la Unidad de Angiología y Cirugía Vascular del Hospital Vithas Castellón, quien nos ha aclarado las principales dudas que nos pueden surgir sobre esta patología.
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¿Qué es el aneurisma aórtico abdominal?
Como su nombre indica, el aneurisma es una enfermedad que afecta al sistema vascular (vasos) del cuerpo (venas y/o arterias). Los vasos tienen una estructura tubular. La enfermedad debilita la pared del vaso y se forma una dilatación con forma de saco que afecta al segmento debilitado. Para entender ambos términos:
- Aórtico: que afecta a la aorta. La aorta es la principal arteria del cuerpo. El corazón impulsa la sangre hacia la aorta; ésta cruza el tórax y abdomen hacia abajo por delante de la columna vertebral. De la aorta salen todas las ramas que llevan sangre a todos los tejidos del cuerpo.
- Abdominal: que afecta a la aorta en la zona de la barriga. En este caso la aorta que está en el tórax (pecho) no se afecta de la enfermedad.
¿Cuáles son las causas que pueden influir en su aparición?
El aneurisma de aorta abdominal es principalmente secundario a padecer arterioesclerosis. La arterioesclerosis es una enfermedad sistémica (puede afectar a las arterias de todo el cuerpo) que es producto de estar afecto de factores de riesgo cardiovascular durante un periodo de más de 10 años. Los 4 factores principales son tabaco, hipertensión arterial, tener diabetes mellitus y problemas de colesterol elevado. Hay también otros factores de arterioesclerosis menos importante como la edad, el sexo masculino y otro tipo de patologías.
Cuantos más factores de riesgo cardiovascular y durante más tiempo está afecto una persona, mayor probabilidad de tener un aneurisma en la aorta u otra arteria del cuerpo.
No hay que olvidar que existen aneurismas que no son provocados por la arterioesclerosis. Aunque la frecuencia de éstos es muy pequeña (pacientes afectos de sífilis, traumatismos fuertes en el abdomen como accidentes de coche, enfermedades raras congénitas que afectan a las arterias, etc.…)
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¿Hay personas con un mayor riesgo de padecerlo?
Por supuesto. Todas las personas que sufren algún factor de riesgo cardiovascular desde hace tiempo (10 años por lo menos) sobre todo si son varones. Además, se ha demostrado un componente genético con lo que si tienen un familiar de 1er grado (padre y/o hermano) con aneurisma de aorta abdominal existe mayor posibilidad de sufrir esta enfermedad.
¿Cómo se manifiesta y cómo se llega a su diagnóstico?
Se suelen diagnosticar por casualidad (de manera incidental) al realizar exploraciones complementarias del abdomen por síntomas o molestias que nada tiene que ver con el aneurisma. Habitualmente el aneurisma de aorta abdominal no provoca molestias, es asintomático. El inconveniente es que, si uno no sabe que lo tiene, el aneurisma va creciendo hasta que la pared débil de la aorta no aguanta más y se rompe; pasa como cuando inflamos en exceso un globo y estalla. Si un paciente sufre una rotura de aneurisma de aorta abdominal (porque desconocía que lo tenía y no se trató) la mortalidad global es entorno al 50%.
Una vez que se confirma, ¿cuál es el tratamiento que se debe seguir?
Es una enfermedad conocida desde hace muchos años, de hecho, personajes importantes a lo largo de la historia han muerto de un aneurisma de aorta abdominal como, por ejemplo, Albert Einstein. Se conoce con exactitud el manejo correcto, lo crucial es diagnosticarlo y saber que uno lo tiene.
Es una enfermedad que no se cura con medicación, la única opción es una operación quirúrgica. Existen 2 técnicas distintas. La primera opción es forrar desde dentro (de manera endovascular) la pared débil del aneurisma con una endoprótesis; un esqueleto tipo malla con una tela especial que impide que la sangre golpe la pared débil del aneurisma, la sangre golpea la tela y así se evita la posible rotura del aneurisma. La segunda opción es abrir la barriga y cambiar la aorta enferma por una prótesis que se sutura en la aorta sana por encima y debajo del aneurisma; con esta técnica se cura el aneurisma.
Ambas son operaciones muy importantes con complicaciones serias, por eso hasta que no hay una probabilidad mínima de que el aneurisma reviente no se realiza la operación. Repito que es una enfermedad muy estudiada desde hace muchísimos años y se conoce perfectamente la evolución natural.
Sabemos perfectamente a partir de cuándo hay que operar un aneurisma de aorta. Esto viene marcado por el diámetro transverso máximo en un TAC con contraste. Este diámetro es de 5.5 cm para hombres y 5 cm para mujeres. Si al diagnosticar un aneurisma de aorta abdominal su diámetro máximo no alcanza estas medidas, lo que hay que hacer es controlarlo. A muchos pacientes cuando se les diagnostica, el aneurisma es pequeño y a veces nunca llega a crecer lo suficiente para operarlo. El control se realiza con ecografía cada 6 o 12 meses; en esta fase hay que tomar ciertos fármacos que ayudan a que el crecimiento del aneurisma, y, por lo tanto, la probabilidad de que se rompa sea menor.
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¿Qué pronóstico tiene una persona a la que se le diagnostica este problema de salud?
Si el diagnóstico se realiza cuando el aneurisma esta íntegro y no roto, el pronóstico es muy bueno. Con las 2 técnicas quirúrgicas el riesgo de complicaciones es menor al 10%. Eso quiere decir que de cada 100 pacientes que se operan 90 superarán con éxito la operación. Evidentemente, si hay complicaciones éstas pueden ser graves ya que hablamos de un problema muy serio de salud y de intervenciones quirúrgicas de mucha seriedad. Lamentablemente después de una operación de aneurisma de aorta se puede terminar en diálisis, perder algún segmento de intestino o alguna extremidad, e incluso, no superarla y fallecer.
El inconveniente es si el diagnóstico se realiza porque el aneurisma de aorta se rompe. En estos casos el pronóstico es nefasto y la mortalidad, según las series y los estudios, puede llegar a alcanzar el 50 %.
¿Cuáles son las posibles complicaciones con las que nos podemos encontrar?
Como ya hemos contado, el aneurisma evoluciona inevitablemente hacia la rotura y muerte. Si un paciente lo tiene y no lo sabe, a menos que fallezca por otra causa, el aneurisma ira creciendo hasta que la aorta no aguante más y se rompa.
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¿Es un problema de salud que se puede prevenir?
Evidentemente que sí. Por un lado, la principal causa es la arterioesclerosis y esto se previene con el control de factores de riesgo cardiovascular; esto quiere decir no fumar, comer sano, hacer deporte, buen control de diabetes y de tensión arterial, etc...
Y por otro lado el aneurisma en sí no es el problema, el problema es la rotura con lo que realizando una simple ecografía abdominal de screening se pude diagnosticar. Si uno sabe que lo tiene se opera y se soluciona. El problema es tenerlo en la barriga y no saberlo.
