MANTECA DE KARITÉ, SHEA BUTTER

Un producto clásico, pero que vuelve a estar en primera línea.

Es un básico excelente para nutrir la piel, los labios y las zonas más secas, pero vamos a saber un poco más.

Cuando leemos etiquetas de muchos productos especialmente productos reparadores y para la piel seca siempre aparece la manteca de karité, o manteca de cacao, de hecho nosotros como formuladores lo usamos muchísimo en algunas de las fórmulas para pieles secas, con eczemas o piel atópica.

HISTORIA Y TRADICIÓN

Se trata de una sustancia extraída de las nueces del árbol de Karité, de hecho en África de donde es originario este árbol está considerado como árbol sagrado, es un árbol centenario. Lo usan como alimento en el que se guisa la nuez entera, para los pueblos africanos que los usan, es la grasa de elección, igual que nosotros tenemos la costumbre de usar, aceite de coco, de oliva o mantequilla. Se extrae las cáscaras de las nueces de la manteca de karité y se trituran y tuestan hasta formar la manteca.

Después, esta pasta es trabajada a mano en unas cubas de agua en las que se llega a ebullición, de forma que se separan la parte grasa, que queda de este modo en la superficie, al enfriarse es fácil de separar, con ello tenemos la manteca de karité más pura y sin refinar.

Y es precisamente esta parte grasa la regeneradora y la que tienen propiedades beneficiosas en la piel. De hecho, este producto final se utiliza en muchas tribus tanto en ceremonias religiosas y culturales, como en tratamientos curativos y siempre mencionada en los textos de farmacología africana. Especialmente en Nigeria.

Se trata de un producto que se conoce y se utiliza desde hace miles de años, Cleopatra ya lo usaba.

COMPOSICIÓN

La manteca de karité es una sustancia de un color blanquecino y como ya he dicho ideal como base de muchos productos cosméticos. Es totalmente natural, al ser una grasa es perecedera, si es natural, lo que debemos tener en cuenta si la vamos a usar en casa como tal. De hecho, visualmente se trata de una pasta sólida en temperatura de medio ambiente pero que se reblandece fácilmente al contacto de las manos, y se licua en aceite al aumentar la temperatura.

Es muy rica en vitamina A, lo que le aporta las propiedades beneficiosas de cicatrización, reparación de la piel. Irá bien en estrías, cicatrices, arrugas, dermatitis o quemaduras. Es extremadamente hidratante y tiene una importante acción antiinflamatoria:

Rica en vitamina E, vitamina A y vitamina F

Ácido esteárico, 20-41%

Ácido oleico 50-60%

Ácido palmítico 2-5%

Ácido linoleico 1%

Ácido linolénico 5-15%

Flavonoides

Esteroles

Uno de los componentes más característicos de este producto es el ácido cinámico, lo que le aporta acción antinflamatoria, de la misma forma que la canela. Los cosméticos pueden contener hasta un 60% de contenido de este componente. Gracias a su solidez y a su capacidad regeneradora es ideal para usar productos como los labiales.

DIFERENTES TIPOS

No es que hayan muchos tipos de manteca de karité sino que realmente podemos encontrar de diferentes calidades, las mejores son las naturales y no refinadas, estas son las que contienen más alto contenido de ácido cinámico. La manteca de karité no refinada tiene un olor mucho más denso, más graso. Sin embargo la manteca refinada es mucho más blanca y casi no huele, aunque disminuyen algunas de sus actividades beneficiosas como pueden ser las antiinflamatorias.

Como he dicho en el anterior punto la composición le aporta los beneficios en la piel sobretodo es por ello es tan utilizado en cosmética sobre todo como regenerante celular.

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Manteca de karité VS Manteca de cacao:

Son muy similares, el método de extracción también, de diferentes frutos el del árbol de Karité o el del cacao, las propiedades son muy similares sin embargo el cacao no es antiinflamatorio, el karité es mucho más graso y oclusivo, por lo que es altamente reparador sobre todo en zonas que necesitan esa oclusión como podría ser irritaciones en la piel importantes, debido a la dermatitis atópica por ejemplo.

PRECAUCIÓN

Puede provocar alergias, en las personas alérgicas a los frutos secos, aunque no lo hayamos testado puede aparecer alergia cruzada a estos.

Las personas alérgicas al látex también pueden ser alérgicos a este componente ya que la manteca de karité ya que puede contener alguna traza de látex.

PROPIEDADES Y USOS

1. Base de cosméticos:

Es el producto alternativo a muchos ingredientes como pueden ser siliconas en cosméticos, de hecho casi todos los productos de origen orgánico la contienen en más o menos cantidad.

Es muy emoliente lo que la hace reparadora.

2. Antiedad:

Al tener el alto contenido en vitaminas como la A, E y F, tiene una alta capacidad regenerante, sobre todo en la reducción de las arrugas y en estimular la producción de colágeno.

3. Filtro solar natural:

Al formar una capa sobre la piel, protege la piel de las diferentes condiciones climáticas que la pueden alterar como puede ser el frío o el viento.

Además tiene capacidad protectora frente los rayos UV, como si tuviera por sí mismo SPF 6.

4. Protector y regenerador en el cambio de pañal:

Gracias a su capacidad antiinflamatoria y antifúngica, la manteca de karité por si misma, solo la no refinada y pura es un buen remedio cuando esta el culito muy irritado y como reparador y cicatrizante. Así evitamos usar productos químicos.

Cuando tenemos el culito del bebé muy rojo e irritado incluso con heriditas, es imprescindible extremar la higiene, lavándolo con agua y jabón neutro, secar posteriormente con una toalla de lino sin arrastrar solo con toques. Calentar la manteca de karité pura entre las manos y aplicarla como si se tratara de una verdadera pomada. Es preferible entonces dejar el culito del bebé el máximo tiempo al aire.

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5. En estrías y celulitis:

La manteca de karité pura tiene capacidad regenerante, gracias a su contenido en vitamina A y propiedades nutritivas. Al ser tan nutriente disminuye la apariencia de la celulitis, la piel se ve mucho más lisa.

6. Nutritivo para el cuero cabelludo y el pelo:

Del mismo modo que es un excelente remedio para el culito del bebé, también lo será para el cuero cabelludo que esté irritado, inflamado. Lo ideal es usarlo como mascarilla, poniéndolo directamente en el pelo, envolviendolo en una toalla caliente, con lo que la manteca va a licuar y penetrar en las fibras del cabello, después lavando el cabello.

COSMÉTICOS CON MANTECA DE KARITE

La mayoría de cosméticos orgánicos o bio, destinados a proteger y a nutrir suelen contener este componente, cuando contienen más aceites, se forman emulsiones o leches mucho más líquidas como podrían ser los body milk. Si además se les añade ceras conseguimos las conocidas Body butter que son mucho más nutritivas. Cremas de manos, cremas para los pies, suelen contener casi todas este componente.

Forma parte siendo el componente estrella de la mayoría de protectores labiales, gracias a su capacidad de proteger del sol, de las temperaturas adversas, del viento e incluso como cicatrización de pequeñas heriditas. De hecho, las conocidas barras de cacao que me nos piden en la farmacia, son barras de manteca de karité a las que se les ha podido añadir otros componentes, aunque son muchos más los productos que lo contienen en más o menos concentración.

DIY CON MANTECA DE KARITE

Crema para piel muy seca y protectora para el frío:

Ingredientes:

1 Cucharada de Manteca de karité

2 cucharada de aceite de rosa mosqueta

3 gotas de aceite esencial de rosas (u otro según el gusto de cada persona)

1 cápsula de vitamina E

Elaboración:

Poner todos los ingredientes a temperatura ambiente en un vaso del batidor eléctrico, se pueden añadir todos de una vez o poco a poco el aceite de rosa mosqueta.

Se abre una cápsula de vitamina E.

Si lo batimos más rato, queda una textura más espumosa y liquida.

Si añadimos más aceite del mismo modo queda más líquido, tipo leche.

Esta crema queda densa, y la aconsejo en pieles especialmente muy secas, y/o para poner por la noche después de una quemadura solar, o especial irritación de la piel. También se puede añadir en lugar de rosa mosqueta, aceite de san juan, que es igualmente muy reparador.