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Si uno de tus objetivos en este nuevo curso es mejorar tu práctica de meditación, tal vez te interés explorar nuevas alternativas y una de ellas es la meditación con visualizaciones, sobre la que hemos hablado con Belén Colomina, psicóloga y colaboradora de la app de meditación Petit BamBou.
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“La visualización es una técnica que utiliza la imaginación incorporando en ella los cinco sentidos, la vista, el olfato, el tacto, el gusto y el oído, para crear en la mente un lugar o una escena lo más próxima a la realidad”, nos comienza anticipando la experta, a la que le hemos preguntado por los posibles beneficios que nos puede aportar esta práctica.
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Estos son sus beneficios
Lo primero que nos explica la experta es que todos tenemos la capacidad de visualizar, aunque es más sencillo para algunos y suele realizarse de forma automática. “Lo importante, en este caso, es que sea consciente y deliberada para que consigamos que sea positiva y constructiva. Cuando es así, puede ayudarnos a relajarnos, tanto físicamente como mentalmente”, nos detalla.
Y tenemos que tener en cuenta que además, si la practicamos de forma regular, puede ayudarnos en el entrenamiento de diferentes habilidades mentales. “Puede ayudarnos en el afrontamiento de miedos, en la ansiedad, en el desarrollo de la consecución de objetivos y metas y en la mejora de la competencia en diferentes tareas, tales como en la preparación de una entrevista de trabajo, una exposición en público o conseguir un rendimiento deportivo alto. De esta manera, conseguimos que mejore la autoconfianza, el foco y la concentración”, nos explica Belén Colomina.
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¿A qué personas les beneficiaría especialmente esta práctica?
Una de las dudas que nos surge es sobre quién puede aprovechar especialmente esta técnica de meditación. En opinión de la especialista, “puede beneficiar especialmente a las personas con ansiedad, con miedos o insomnio y también a todas aquellas que necesiten adquirir o mejorar habilidades mentales”.
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¿Cómo se practica?
Una vez que tenemos claros sus beneficios, es el momento de tomar nota de cómo debemos llevarla a cabo. “Se trata de evocar en tu mente imágenes que representen escenas agradables o beneficiosas para ti con un alto grado de realismo. Para ello, nos implicamos en ella con los cinco sentidos”, nos comenta.
Y, añade que, en todos los casos, es importante pasar de una visualización automática a una consciente y dirigida por un profesional que pueda ayudarte a adquirir el hábito y la formulación correcta individualizada a tu necesidad. ¿Es una práctica sencilla o requiere de tiempo para sacarle partido y realizarla de forma correcta? “Es una práctica sencilla pero, si no tienes facilidad y se te hace complicado, es recomendable que un profesional te ayude a desarrollar la habilidad. La duración de la práctica dependerá del objetivo que quieras alcanzar y la dificultad que supone esto para ti. A mayor hábito, mayores resultados sostenibles en el tiempo”, concluye la experta.