Los 6 suplementos para la salud que sí están avalados por Harvard
Te pueden ayudar si tienes colesterol alto, hipertensión o ansiedad. Eso sí, los expertos de la prestigiosa Universidad de Harvard recuerdan que siempre debes consultar con el médico y comprarlos en establecimientos autorizados que garanticen que el producto es seguro y de calidad
Colesterol alto, hipertensión o ansiedad son algunos de los problemas de salud que, frecuentemente, se tratan con medicamentos. Sin embargo, hay personas que pueden tener síntomas leves de estas condiciones clínicas o que la manifestación de la patología todavía no es preocupante y puede abordarse con productos no farmacológicos. Asimismo, también hay pacientes que no toleran la medicación. En estos casos, los suplementos dietéticos pueden ser una opción, según el Dr. Donald Levy, director médico del Centro Clínico Osher para la Medicina Integrativa en el Hospital Brigham and Women's y profesor clínico asistente de medicina en la Escuela de Medicina de Harvard.
Te recomendamos
Y es que los estudios han demostrado que algunas plantas medicinales, vitaminas, minerales y otras sustancias, ya sea tomadas solas o en combinación con los tratamientos tradicionales, pueden ser efectivas para tratar estas condiciones. Además, este tipo de remedios suelen ser, en su mayoría, seguros de usar, siempre y cuando el médico sepa que se van a tomar y lo autorice porque no existe ninguna contraindicación ni pueden interactuar con otros medicamentos que esté tomando el paciente. ¿Cuáles son los suplementos que avala Harvard? A continuación te los comentamos.
Las estatinas son los medicamentos típicos que se recetan para mejorar el colesterol alto, pero hay alternativas para las personas que no pueden tomarlas.
1. Vitamina D3
Si no puedes tolerar las estatinas, tus niveles de colesterol todavía no son preocupantes y tienes déficit de vitamina D (lo que el Dr. Levy define como un nivel sanguíneo por debajo de 32 nanogramos por mililitro), un suplemento de vitamina D3 podría ayudar, según el Dr. Levy. "Es interesante, porque después de tomar el suplemento, algunas personas pueden tolerar las estatinas cuando antes no podían", señala.
2. Fitosteroles
Los fitosteroles (también llamados estanoles o esteroles vegetales) se derivan de las membranas celulares de las plantas y se pueden tomar en forma de pastillas. También se encuentran naturalmente en alimentos como nueces, legumbres, frutas y verduras. Los estudios muestran que los suplementos de fitosteroles pueden reducir el colesterol malo o LDL en hasta un 14% en personas que toman de 2,000 a 3,000 miligramos (mg) al día, indica el Dr. Levy. Al elegir un producto, busca un sello de calidad y también busca un producto que contenga fitosteroles esterificados, agrega el experto.
3. Suplementos de levadura de arroz rojo
Los suplementos de levadura de arroz rojo se hacen a partir de un tipo de levadura que crece en el arroz blanco. Este derivado se ha utilizado durante mucho tiempo en la medicina china, y los estudios modernos muestran que las personas que tomaron de 2,400 a 3,600 mg al día durante seis meses pudieron reducir su colesterol LDL en un 20% a 25%, asegura el Dr. Levy.
Un estudio de 2008 publicado en The American Journal of Cardiology también encontró que la levadura de arroz rojo fue efectivo para reducir las muertes e infartos recurrentes en casi 5,000 personas que tomaron el suplemento después de un ataque cardíaco.
Busca un producto de alta calidad, advierte el Dr. Levy, ya que este complemento alimenticio puede contener un contaminante peligroso, la citrinina, que es una toxina producida por hongos que puede causar intoxicación alimentaria, daño renal y problemas del sistema inmunológico, alerta en la nota distribuida por la Escuela de Medicina de Harvard.
Algunos suplementos han demostrado ser efectivos para reducir la presión arterial alta, según el Dr. Levy.
4. Citrato o glicinato de magnesio
Algunas personas tienen deficiencia del mineral magnesio. Sin embargo, las pruebas de sangre no son buenas para detectar los niveles totales de magnesio dentro del cuerpo, porque gran parte del magnesio de nuestro organismo se almacena en las células. Muchas personas descubren el déficit solo después de que un nutricionista analiza su dieta, explica el profesor de Harvard. En esas personas, los suplementos pueden aumentar los niveles de magnesio y ayudar a reducir la presión arterial alta cuando se toman junto con tratamientos tradicionales para la presión arterial.
Por lo general, se necesita hasta seis semanas para que los suplementos muestren efecto. Sin embargo, no todos deben tomar magnesio, especialmente aquellos con enfermedad renal, advierte el Dr. Levy,. Por ello, insiste en que hay que consultar antes con el médico.
5. Licopeno
Otro suplemento antioxidante que también puede ayudar a reducir la presión arterial alta es el licopeno. Esta sustancia es un antioxidante que le da a vegetales como los tomates su color rojo. Si bien los productos a base de tomate, como las salsas enlatadas, contienen licopeno, esos alimentos a menudo tienen mucho sodio. Por lo tanto, en muchos casos es mejor optar por un suplemento.
Por lo general, se recomienda tomar de 15 a 25 mg de licopeno al día para ver una reducción en la presión arterial.
Los problemas de ansiedad son comunes, especialmente en el momento de la menopausia.
6. Extracto de manzanilla
Aunque lo relaciones con los problemas digestivos, este remedio natural es también efectivo para aliviar los estados ansiosos. Este extracto, que proviene de una flor, se ha utilizado durante mucho tiempo como terapia para la ansiedad. La ansiedad a menudo va de la mano con la falta de sueño, por lo que no sorprende que la manzanilla también se recomiende a menudo como ayuda para dormir.
Se pueden tomar infusiones de manzanilla, pero tomar un suplemento puede ser más conveniente (y requerir menos viajes nocturnos al baño si se toma antes de acostarse).
De hecho, como explica este especialista de Harvard en Medicina Integrativa, los estudios han visto que las personas que tomaron suplementos de manzanilla experimentaron una reducción significativa en la ansiedad en comparación con las personas que tomaron un placebo, apunta el Dr. Levy.
Por lo general, es mejor comenzar tomando una cápsula de 220 mg al día. Busca uno que contenga un 1.2% de una sustancia llamada apigenina.
No tomarlos sin consultar con el médico y busca siempre sellos de garantía
Si bien algunos suplementos pueden ser potencialmente útiles (o al menos inofensivos), la falta de supervisión regulatoria de estos productos significa que otros podrían ser ineficaces o peligrosos, o podrían contener contaminantes peligrosos.
Por ello, el experto recuerda que antes de tomarlos hay que preguntar al médico para saber si no están contraindicados en nuestro caso, y comprarlos en establecimientos que ofrezcan la garantía de que el producto es seguro.
,type=downsize)
© Getty Images
© Getty Images
© Adobe Stock
